Brasilia.- La Cámara baja del Congreso de Brasil aprobó un controvertido proyecto de ley, denostado por grupos activistas, que flexibiliza los requerimientos para aprobar licencias de obras de infraestructura, minería, agricultura y otras actividades de impacto ambiental.
La resolución desató críticas entre grupos de conservación ambiental en momentos en que los registros de protección de Brasil están bajo un fuerte escrutinio por el avance de la deforestación en la selva amazónica.
Además, la administración del presidente estadounidense Joe Biden está en conversaciones con Brasil para posiblemente financiar los esfuerzos de conservación, pero ha exigido que el país primero muestre resultados en los esfuerzos por frenar la destrucción.
El proyecto de ley de licencias, que fue aprobado a última hora del miércoles, pasará ahora al Senado brasileño para su consideración.
Para muchos tipos de obras, la ley permitiría que los permisos se emitan automáticamente si el solicitante cumple con ciertos requisitos de presentación. Eso incluiría proyectos como la repavimentación de carreteras en el Amazonas, que fueron construidas durante la dictadura militar y se han deteriorado.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, se ha comprometido a repavimentar una de esas carreteras que, según un estudio científico, aumentará la deforestación en cinco veces hasta 2030, lo que conducirá a la devastación de un área más grande que el estado de Florida en Estados Unidos.
Los defensores del proyecto de ley incluyen al poderoso grupo de presión agrícola de Brasil en el Congreso. Argumentan que las reglas bizantinas de permisos ambientales obstaculizan la inversión e impiden el crecimiento económico del país, rico en recursos naturales.
Si bien sus partidarios dicen que el proyecto de ley eliminará la concesión de licencias para ciertos tipos de proyectos que se consideran de bajo riesgo, los ambientalistas sostienen que abrirá las compuertas a la degradación ambiental.
Decenas de agrupaciones no gubernamentales firmaron el miércoles una carta a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), a la que Brasil espera unirse, expresando su preocupación por las políticas ambientales, incluido el proyecto de ley.
«Si se aprueba, esto resultará en degradación y contaminación de todo tipo, incluido el aumento de la deforestación en la Amazonía y la proliferación de nuevos desastres ambientales», indicó la carta.
Nueve exministros de Medio Ambiente emitieron una carta abierta el lunes oponiéndose al proyecto de ley, reconociendo que se necesitaba una reforma, pero citando una larga lista de problemas con una propuesta que, según dijeron, supondría un «golpe mortal» a la concesión de licencias como una herramienta para garantizar el desarrollo sostenible. (Reuters)