Por medio de un memorial, el Gobernador de La Paz, Santos Quispe, retiró la última acusación particular que se tenía en el caso del bebé Alexander, contra los médicos Jhiery Fernández, Sandra Madeni y la enfermera Lola Rodríguez, con lo que, sin acusadores, el juicio podría concluir en las siguientes horas.
La abogada de la Gobernación, Nancy Llojlla, confirmó que el oficio con el retiro de la acusación se presentó este martes ante el Tribunal Cuarto de Sentencia de La Paz y debe ser leído en la siguiente audiencia en espera de la determinación que asuman los jueces en el caso.
“Para mí y mi familia, hoy recién se acaba la pesadilla que empezó en 2014. Ahora sí respiro tranquilo, pero también lamento que siga la negligencia de algunos representantes que se presentan a estos procesos sin estar informados, que cambian su postura por el rechazo de la sociedad, y van a las audiencias como levanta manos y a repetir como loros ‘me adhiero a lo que diga el representante del Ministerio Público’. Creo que deberían ser sancionados por no cumplir con su trabajo como abogados”, declaró a @VisorBolivia el médico Fernández al enterarse del retiro de la acusación.
Por su lado, Mónica Palma Altamirano lamentó que los abogados de la Gobernación de La Paz, el Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges), la Defensoría de la Niñez de la Alcaldía y los actuales fiscales “no admitan que el doctor Jhiery Fernández nunca cometió ningún delito y que se equivocaron en toda las etapas del proceso, desde la investigación hasta el juicio, donde amenazaron a testigos con el fin de mantener en la cárcel al doctor y condenarlo, pese a que sabían no había pruebas y él era inocente”.
Fernández recordó que en la audiencia del lunes, Llojla y el abogado del Sedeges, Jhon Ruiz, dijeron que continuarían con la acusación, a pesar de que no contaban con pruebas propias, luego de que la Fiscalía retiró la acusación. Posterior a las advertencias de los jueces, sobre que su decisión conllevaba una responsabilidad personal e institucional, Ruiz dio marcha atrás y retiró la demanda. La Gobernación fue la única que quedó como acusador hasta este martes.
“Teníamos la esperanza de que el Ministerio Público encamine la investigación y es de conocimiento público que el bebé tenía ocho meses y necesitaba de mucha protección”, afirmó Llojlla, sin explicar cuál fue el fundamento legal para su postura en esa primera audiencia.
Por otro lado, afirmó que la Gobernación analiza si se sumarán al proceso que se sigue contra los exfiscales Susana Boyan y Edwin Blanco, por procesar a un inocente y ocultar pruebas del caso. De la misma forma, se prevé que ahora inicie otro proceso con el fin, ahora sí, de esclarecer las causas de la muerte del bebé Alexander. (VisorBolivia)