Cerca de 30 personas, entre mujeres y varones pertenecientes a la línea de acción de promotoras comunitarias, fueron capacitadas en la temática de lucha contra la violencia hacia las mujeres, según el Centro de Desarrollo Integral de la Mujer Aymara (CDIMA).
El principal objetivo de la instrucción es que las promotoras comunitarias se conviertan en el nexo de motivación y apoyo entre las mujeres que viven situaciones de violencia, pero además, ser guías para realizar denuncias y hacer seguimiento de un proceso legal, en caso de que sufran maltrato.
“Como recordarán, hemos hecho un llamado a todas las voluntarias “Renueva tu compromiso con la sociedad”, entonces este nuevo grupo de la línea de acción de promotoras comunitarias son quienes mediante la institución CDIMA están recibiendo capacitaciones constantes y se tomarán las evaluaciones para ver el proceso de aprendizaje”, informó Carla Esprella, jefa de Unidad de la Mujer.
Explicó que los subtemas que se desarrollaron fueron conceptos de violencia, manejo de la Ley 348, tipos de violencia, entre los más destacados. Asimismo, resaltó que durante este tiempo de formación se evidenció compromiso y responsabilidad de los voluntarios participantes.
“Se tiene 180 promotoras comunitarias y para que exista una buena captación de conocimiento las estamos separando por grupos, para que puedan capacitarse, y en esta oportunidad se está instruyendo a 25 promotoras comunitarias”, agregó Esprella.
Dijo que tras la capacitación se procede a la evaluación para hacer la medición de conocimiento, y a partir de ello se continúe con el siguiente paso que es replicar lo que han aprendiendo en su entorno familiar y laboral, pero además puedan identificar y hacer el seguimiento de casos de maltrato en las defensorías y otras instancias.
De la misma forma, los que recibieron estos cursos en diferentes temas de violencia contra la mujer ya tienen la suficiente instrucción como para poder dictar cursos en otros grupos de personas, donde lo primero que se realiza es la concientización a las personas tanto mujer y varón.
“Tenemos estas actividades, donde de forma continua socializamos todos los temas a tratarse y cuando ya contamos con grupos de personas que deciden recibir las mismas ahí es donde nuestro personal ya capacitado actúan para mostrar todos los problemas que suceden y a causa de qué nacen los maltratos físicos y psicológicos a la mujer”, explicó Esprella.