Tokio.- El partido del nuevo primer ministro japonés, Fumio Kishida, ha recibido ayer un duro golpe con los resultados de las elecciones parciales al Senado en las que la oposición ha logrado hacerse con uno de los dos escaños en juego. Los comicios se han planteado como un anticipo de las elecciones generales previstas para el 31 de octubre.
Las proyecciones publicadas por la televisión pública NHK y por la agencia de noticias Kiodo apuntan a que Shinnosuke Yamazaki, apoyado por la oposición, se ha impuesto en la prefectura de Shizuoka tras derrotar al candidato del Partido Democrático Liberal de Kishida.
El primer ministro se ha implicado personalmente en la campaña para intentar conservar ese escaño y el otro en juego, el de la prefectura de Yamaguchi, considerada un bastión del PDL. Además, son los primeros comicios desde que Kishida asumió la jefatura del Gobierno, el pasado 4 de octubre.
El PLD ha intentado ganar popularidad con promesas de incrementos de ingresos, lucha contra la desigualdad y un programa de ayudas para impulsar la economía, afectada por la crisis del coronavirus.
Las encuestas auguran una mayoría de los partidos que apoyan a Kishida en la Shugiin o Cámara de Representantes del Parlamento japonés ante un pujante Partido Democrático Constitucional que lidera la oposición y ha prometido elevar el salario mínimo y subir impuestos a los tramos más altos. El PLD ha gobernado Japón durante 62 de los últimos 66 años. (Europa Press)