Gobierno sin rumbo y Bolivia sin Estado

El expresidente Jorge Quiroga Ramírez cuestionó que luego de las distintas denuncias por avasallamientos, con violencia en el país y los recientes hechos que terminaron en el secuestro a efectivos policiales y periodistas, el gobierno del Movimiento al Socialismo (MAS) no logre avanzar en las investigaciones.
Luego de ejecutarse operativos conjuntos entre la Policía y el Ministerio Publico, durante el fin de semana, el exmandatario cuestionó que estas acciones no hayan derivado en arrestos de algún implicado y atribuyó este hecho a la tardanza en la toma de decisiones, por parte de las autoridades competentes.
Desde su cuenta de Twitter, señaló que por los recientes hechos, el Gobierno se halla sin rumbo y la población boliviana debe sufrir por un Estado ausente.
“Decenas de criminales armados asaltan propiedades, secuestran policías, toman rehenes y disparan contra periodistas y como resultado no se tiene ni un solo arrestado, nadie ha sido procesado; las autoridades dicen que es un mero ‘altercado’. Tenemos un Gobierno sin rumbo y Bolivia sin estado”, expresó Quiroga.
Por su parte, la senadora Andrea Barrientos (CC) señalo que más allá del problema por el avasallamiento de tierras esta la presencia de grupos armados que cometen actos en contra de la población y la propiedad privada.
“No es un tema solamente de tierras, es problema de grupos irregulares que portan armamento y el Gobierno brilla por su ausencia, por lo cual se presenta la imperiosa necesidad de que se tomen acciones efectivas para evitar que se repitan este tipo de hechos dentro el territorio boliviano”, manifestó la legisladora.
El Ministerio de Gobierno, la Policía Boliviana y el Ministerio Publico, el fin de semana, realizaron un operativo de incursión en la zona, donde el pasado jueves, policías, periodistas y civiles fueron emboscados y posteriormente tomados como rehenes, por un grupo de individuos que hasta la fecha no fueron identificados; en este operativo no se produjo ninguna detención, pues los implicados habían abandonado la zona, hecho que fue duramente criticado por opositores y la población en general.