Las últimas lluvias bajaron la intensidad, pero no apagaron los incendios en la Reserva de la Biósfera y Tierra Comunitaria de Origen Pilón en Rurrenabaque, Beni. En tal sentido, continúa el trabajo las brigadas de bomberos y voluntarios que combaten los focos de quema, según informó el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes.
Informó que la lluvia ayudó a disminuir considerablemente el incendio, pues las precipitaciones fueron intensas en un sector. “En otras partes la lluvia fue muy breve, pero importante para aplacar la intensidad de las llamas”, detalló al manifestar que esto facilitará la labor de las más de 200 personas que componen las brigadas enviadas a la zona.
El viceministro indicó que la zona afectada, presenta un fuego rastrero que se produce en pastizales y helechos secos. En este sentido la labor de los bomberos está orientada a evitar que las llamas afecten a otras zonas más boscosas.
“No se observan comunidades ni actividades productivas en la zona, como para pensar en un fuego provocado por personas, producto de los chaqueos”, aseguró.
Por su parte las autoridades departamentales del Beni, manifestaron que los incendios forestales pueden ser controlados mediante el monitoreo con tecnología satelital y obtener información relevante del origen de focos de fuego, el desarrollo de los mismos y las posibilidades de afectar vegetación, instalaciones y comunidades. Este resultaría un innovador método que integra herramientas diseñadas para realizar análisis y obtención de datos y, a partir de ellas, facilitar la toma de decisiones en el control de los incendios forestales.
Por el momento, se desconoce la extensión del área afectada por el incendio. Desde Defensa Civil, se aguarda el informe del Ministerio de Medio Ambiente y Aguas para cuantificar el daño.