Unicef celebró sus 75 años de servicio en favor de la niñez y la adolescencia, en acto realizado en el auditorio de la Asamblea Legislativa, al finalizar la gestión 2021.
En su discurso conmemorativo, Rafael Ramírez, representante de Unicef, destacó que la organización ha trabajado infatigablemente, desde su creación en 1946, para mejorar las vidas de niños y adolescentes, protegiéndoles del peligro y la enfermedad, proporcionándoles alimentos y dándoles la oportunidad de aprender y, sobre todo, de alcanzar su máximo potencial.
«Unicef está en Bolivia desde 1950, ya son 71 años, y durante nuestro trabajo en conjunto con el Estado y la sociedad hemos contribuido en importantes logros por la niñez», resaltó Ramírez, entre otros detalles referidos a la educación y la salud.
El ejecutivo mencionó que en los últimos años la organización promovió la participación de adolescentes y jóvenes en temas de cambio climático, la participación de las niñas en ciencia y tecnología, en avances de la normativa de la primera infancia y, sobre todo, en una reacción oportunidad frente a la emergencia del covid-19.
«En estos 75 años, creo que hemos reconfirmado y reconfirmamos nuestras prioridades claves de corto plazo: aprendizaje a distancia para salvar futuros, inmunización para salvar vidas, agua para salvar comunidades y salud mental para salvar familias», dijo el Representante de Unicef, a tiempo de expresar su compromiso y esperanza de asociarse con todos los sectores para crear un mundo apropiado para niñas y niños.
Entre los invitados estuvieron la alcaldesa de Cobija, Ana Lucia Reis; Bernardo Ramos, representante de la Cámara de Diputados; Susana Sottoli, coordinadora residente de Naciones Unidas, miembros del grupo de Naciones Unidas; diplomáticos de la Cooperación Sueca, y de Canadá, la embajadora Nacional de Buena Voluntad de Unicef Bolivia, Desiree Durán, y el grupo Llajtaymanta que le puso la alegría a la velada con una selección de temas, que pusieron a bailar a todo el auditorio.
