Tras conocerse que Estados Unidos ofrece una recompensa de $us 5 millones por información para juzgar al exjefe antidrogas Maximiliano Dávila, por narcotráfico, el representante del Conade, Manuel Morales, advirtió que otorgar “protección” al exjefe policial en cárceles bolivianas, traerá problemas al gobierno de Luis Arce.
En criterio del representante del Comité Nacional de Defensa de la Democracia (Conade), la justicia de Estados Unidos, a diferencia de la administración judicial boliviana, no deja “cabos sueltos” por lo que buscará juzgar al exjefe antidrogas para que cumpla una sanción.
Dávila, según una investigación de la DEA (Administración para el Control de Drogas, por su sigla en inglés) fue parte de un grupo de narcotraficantes que buscaba llevar droga a Estados Unidos. Habría ofrecido aeropuertos clandestinos y protección armada a narcotraficantes.
Luego de conocerse esa pesquisa, Dávila fue capturado en enero en Bolivia, a cinco minutos de cruzar la frontera con Argentina. El exjefe antidrogas fue acusado de cometer el delito de legitimación de ganancias ilícitas, por lo que se dictó su detención preventiva en el penal de San Pedro de La Paz.
“(En Estados Unidos) no van a dejar ningún cabo suelto y por eso mismo tenerlo a Dávila en Bolivia, protegido bajo este sistema, va a generar problemas futuros al gobierno de Luis Arce y lo va a empezar a involucrar como un gobierno que protege a narcotraficantes y así va a ser catalogado también Bolivia”, dijo a Panamericana Morales.
Se conoció también una nota del gobierno de Estados Unidos al gobierno boliviano, en la que se comunica la intención de pedir la extradición del exjefe antidrogas del gobierno de Evo Morales.
Si bien Whasington todavía no formalizó el pedido de extradición, el presidente del Senado y alto dirigente de los cocaleros del trópico cochabambino, Andrónico Rodríguez, se anticipó en rechazar esa posible demanda. «No creemos que corresponde extradición. ¿Por qué tendríamos que tener a un compatriota en otro país para que sea juzgado de un delito cuando debemos juzgarlo en nuestro país?» se preguntó.
Morales insistió en que la justicia estadounidense no dejará cabos sueltos, debido a que se trata de un plan que implica el tráfico de cocaína hacia territorio estadounidense a través de cuatro países.
“Es una válvula de presión que va a ir incrementándose y lo más aconsejable es que el gobierno (de Arce) retroceda, que pueda hablar con la DEA, cooperar, intercambiar información sin perder soberanía, pero que finalmente Dávila a Estados Unidos a enfrentar la causa por narcotráfico abierta”, complementó el representante del Conade. (Brújula Digital)