Clases virtuales, es un reto lograr que los estudiantes participen

La pandemia aún no llega a su fin, por el contrario, los casos de covid-19 van en aumento en el ciclo escolar 2022. No sabemos con seguridad si regresaremos o no a las aulas de forma presencial. De hecho, uno de los principales desafíos que enfrentan los docentes es prepararse ante posibles escenarios en las modificaciones de las modalidades de atención, pero entre los inconvenientes en las clases virtuales está la participación de los estudiantes.
Los docentes en las clases virtuales han vivido el problema de la participación parcial de los estudiantes, quedándose con interrogantes como ¿aprendieron mis estudiantes?, ¿tendrán dudas?, ¿de qué manera puedo mejorar esos aprendizajes?
El miedo a participar parte del “miedo al qué dirán”, radica en que si te equivocas serás juzgado por tus compañeros o medido por una baja calificación. Este miedo es muy cercano al miedo a hablar en público o glosofobia. Este miedo se acumula con el tiempo, porque la persona considera que “no es capaz”, ya sea por creencias aprendidas o heredadas. Puede llegar a generarle trastornos en el lenguaje y pensamiento.
Aunque no todos los estudiantes sufren por ese nivel de miedo, ni todos permanecen en silencio por esta razón, es necesario conocer la glosofobia para ser empático con los estudiantes. En el caso más extremo y puedas ver otro punto de vista, más allá de la pereza o falta de interés puede haber una razón de peso.
Si la interacción en el aula tradicional es difícil, en medios virtuales el reto es mayor. Algo que funciona es bajar la tensión en los estudiantes y generar un ambiente de tolerancia para promover la participación. Son herramientas directas contra el miedo a hablar y ser juzgado.
Ideas acerca de cómo hacer que los estudiantes participen en clase virtual son:
– Olvida la jerarquía. Cuando vamos a generar interacción es vital olvidar la relación profesor-estudiante y promover más una comunicación bidireccional, que se refiere a esa comunidad entre pares, donde creamos el conocimiento. Una estrategia es formular preguntas que no tengan una única verdad.
– Siempre agradece con frases como: “excelente pregunta, gracias por participar”. Estas frases simples causan un ambiente en confianza y un buen impacto emocional en tus estudiantes.
– Establecer reglas de convivencia y participación digital, prohíbe la creación de memes por alguna situación que pueda avergonzar a tus estudiantes o volverse viral por fallos en las clases virtuales. Desde el contexto de tu clase establece las normas que consideres necesarias.
– Promueve la participación, formula preguntas que generen cercanía en los estudiantes, como: cuáles son sus redes sociales, equipos de fútbol y jugadores preferidos. Busca preguntas que no necesariamente evalúes con un número o una letra, sino que tus estudiantes sientan que pueden opinar sin que tenga una consecuencia negativa.
– Usa todos los medios disponibles: Chat, video, audio, documentos compartidos con comentarios. ¿Has reflexionado sobre la privacidad de los estudiantes? Sí, pues al usar la cámara tienes acceso a su espacio. Si tu estudiante no quiere mostrarte su espacio, debemos respetarlo.
– Se puede realizar encuestas cortas durante la clase, con preguntas cerradas, esto permite que los estudiantes tengan interacciones rápidas y estén atentos.
– Pon un tiempo límite al usar el micrófono. Cuando un estudiante es más participativo, los demás se pueden sentir opacados y pierden el interés, incluso en toda la clase, poner límite les da espacio a todos para participar.
Estas ideas pueden ayudar a que los estudiantes participen en clases, se las puede complementar con varias estrategias, como incluir componentes lúdicos. Se trata de dar una línea de acción con un propósito de enseñanza más allá de las calificaciones y, como siempre, sigamos un consejo: “Simplifica tus clases”.