Durante los últimos dos años la tecnología ha adquirido gran peso en el entorno educativo; principalmente por la pandemia que continua. Con la tecnología cada vez más integrada en los centros educativos, las escuelas necesitan medidas de seguridad que garanticen la protección online de los escolares. La educación en ciberseguridad es un factor clave para garantizar la educación.
Por ello debemos tomar en cuenta lo siguiente:
– Mejorar la comunicación entre padres e hijos. Fortalecer la confianza entre ellos aumentará la probabilidad de que los niños avisen sobre cualquier ataque que sufran o presencien.
– Educación digital desde edades tempranas. Sensibilizar a los más jóvenes sobre la importancia de la seguridad online desde la infancia, es esencial para prevenir y hacer frente a posibles amenazas a las que se exponen los menores cuando hacen uso de Internet, apps de mensajerías o redes sociales.
– Reducir riesgos, limitar el tipo y la cantidad de datos personales que comparten los niños en Internet, para minimizar las probabilidades de sufrir ataques.
– Proteger sus dispositivos, disponer de un software completo de seguridad (antivirus) para proteger los dispositivos de los más pequeños y asegurar su privacidad. Además, establecer el control parental de sus dispositivos evitará que los menores accedan a sitios peligrosos y webs no autorizadas por los padres.
La formación de los docentes en ciberseguridad es fundamental para sensibilizar a padres y estudiantes sobre la importancia de proteger sus dispositivos, y sobre las amenazas online y sus consecuencias. Es muy importante que los centros educativos hagan campañas de ciberseguridad para que los docentes informen a padres y alumnos sobre cómo hacer un uso responsable y adecuado de sus dispositivos y exponerse menos a potenciales amenazas.
Algunos principios sobre ciberseguridad en centros escolares:
– El mejor embajador del cambio es el director del colegio. Por él debe empezar el despliegue de la ciberseguridad.
– La ciberseguridad debe estar incluida en el documento de reglamento interno de la unidad educativa.
– Priorizar los aspectos vulnerables y todos sus riesgos relacionados.
– Diferenciar entre datos, infraestructuras, dispositivos, aplicaciones y personas.
– Fortalecer la protección y cultura de ciberseguridad para todas las personas que tengan accesos a las clases online.
– La ciberseguridad es algo integral y colaborativo, y forma parte de la cultura de las unidades educativas.
– Incluir y concienciar a toda la comunidad educativa.
– Establecer características de seguridad exigibles en los sistemas tecnológicos.
– Construir defensas que se adapten a los nuevos ataques y disponer de protocolos de actuación para situaciones de fallos en la seguridad.
– Planificar la comunicación ante incidentes de ciberseguridad y situaciones que sean comprometedoras.
La ciberseguridad en centros educativos se ha convertido en algo imprescindible, no todos los estudiantes tienen este medio y están expuestos en “internet”. No contamos con los medios tecnológicos necesarios para implementar políticas que precautelen la integridad de nuestros estudiantes, mientras que la tecnología cada día es más sugestiva. Y si no se tiene un control parental adecuado, están expuestos ante ciberdelincuentes y extorsionadores que pueden afectar el desarrollo cognitivo y crear traumas parciales o permanentes en nuestros hijos.
Ciberseguridad en educación
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