En su calidad de Mecanismo Nacional de Prevención de la Tortura, la Defensoría del Pueblo exigió al Estado boliviano respetar toda forma de protesta pacífica, señalando que la huelga de hambre iniciada por la expresidenta Jeanine Añez se constituye un ejercicio legítimo del derecho a la libertad de expresión, y como tal debe ser respetado.
Esta instancia observó que el Auto Complementario de 18 de febrero de 2022 emitido por el juez Franklin Siñani, afecta el derecho a la protesta con el que cuenta todo ciudadano.
“(…) la Gobernadora del Centro de Orientación Femenina de Miraflores debe instruir y efectivizar que los médicos de dicho centro penitenciario, aun en contra de la voluntad de la accionante, garantizando el derecho a la propia vida de la privada de libertad, sin mayor demora, inicien inmediatamente el tratamiento de rehidratación u otros que sean requeridos”, señala esta resolución.
Se reitera que es importante hacer notar que si bien el Estado se encuentra en una posición de garante de la vida y salud de las personas privadas de libertad, también debe garantizar su derecho a la protesta y en el caso de huelgas de hambre, se debe considerar la capacidad de decidir que tenga el huelguista y verificar con criterios médicos objetivos si se está llegando a una situación con un inminente riesgo de perder la vida.
De la valoración a la salud de Añez, realizada por médicos especialistas el 18 de febrero del año en curso, se estableció como diagnóstico una deshidratación leve, por lo cual se encontraría estable y no ameritaría una intervención, por lo cual no se le puede obligar a recibir tratamiento médico en contra de su voluntad.
La Defensoría, además, expresó su preocupación por el estado emocional de la exmandataria, por lo que ha solicitado a la Dirección General de Régimen Penitenciario que se realicen valoraciones para una contención emocional, ya que se observa que está claramente afectada. Asimismo, pide que se realicen revisiones médicas periódicas a la privada de libertad.
Con relación a los incidentes violentos registrados en las afueras del penal de Miraflores, se pidió a la Policía Boliviana tomar las medidas necesarias para evitar manifestaciones a favor o en contra de Jeanine Añez, respetando las normas para el uso de la fuerza, y en resguardo de la integridad física y psicológica de todas las mujeres que se encuentran privadas de libertad del citado centro, así como la de sus familiares y las visitas.
Además, insta al Ministerio Público a investigar las denuncias de la hija de la señora Añez, y recuerda a la Dirección General de Régimen Penitenciario, un trato igualitario y sin discriminación para todas las privadas de libertad, sus familias y visitas.
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Expresidenta Jeanine Añez
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