Por: Ana Pérez
El liderazgo excepcional crea un negocio excepcional: motiva a un equipo a moverse de manera enfocada y coordinada para alcanzar un objetivo común. Sin embargo, hacer esto de manera efectiva requiere decisión, propósito y previsión. Es un verdadero desafío liderar de una manera que promueva la admiración y el respeto.
En este post veremos, en primer lugar, las principales diferencias entre los líderes y los jefes y, en segundo lugar, algunos consejos sobre cómo ser un líder eficaz en la empresa.
Cómo ser un líder y cómo ser un jefe
Las diferencias principales entre un líder y un jefe son las siguientes:
Los jefes dan órdenes que deben ser obedecidas, mientras que los líderes fomentan el diálogo y prestan atención a las apreciaciones que realicen los miembros del equipo.
Los jefes suelen ser percibidos por parte de los miembros del equipo como personas ajenas a él, mientras que los líderes consiguen ser apreciados como parte del mismo. Esto, por supuesto, supone numerosas ventajas en lo relativo a las actitudes de los empleados.
Los jefes utilizan una comunicación vertical respecto al organigrama empresarial, mientras que los líderes combinan la comunicación vertical con la comunicación horizontal.
La empresa que se conoce por utilizar líderes en lugar de jefes da una mayor sensación de diálogo y buen clima laboral, por lo que atraerá y retendrá mucho más fácilmente el talento.
Los líderes tienen mayores probabilidades de ganarse tanto el respeto como la admiración de los miembros del equipo, mientras que los jefes se ganarán principalmente el respeto.
Los jefes despiertan unas emociones mucho más relacionadas con el estrés que los líderes, quienes motivan e inspiran.
Por lo tanto, para saber cómo ser un líder solo basta con prestar atención a estas diferencias y aplicarlas.
Para ser un líder eficaz
Por supuesto, no basta con que un líder se gane la confianza de los empleados y que despierte buenas emociones. Debe, además, obtener resultados productivos para la empresa.
En este sentido, proporcionamos algunos consejos acerca de cómo ser un líder que contribuya a la generación de beneficios al mismo tiempo que contribuya a la felicidad de los trabajadores:
El líder eficaz se preocupa por el bienestar de su equipo. Perder de vista el objetivo es uno de los errores que suele desembocar en baja productividad y pérdida de ingresos. Mantenerlo en mente a través de una figura que despierta respeto y admiración es la forma ideal para que los trabajadores pongan todo de su parte para no olvidarlo.
El líder eficaz se preocupa por el bienestar de su equipo. Utiliza su empatía para detectar el estado de ánimo de cada uno, les pregunta cómo se encuentran y utiliza los recursos disponibles para suavizar posibles situaciones de estrés o de desánimo.
El líder eficaz emplea tanto herramientas de motivación intrínseca (es decir, la que surge del propio individuo) como de motivación extrínseca (es decir, la que procede de algún estímulo externo, sea positivo como una recompensa o negativo como un castigo). Por supuesto, sabe combinarlas de la forma adecuada y utilizar cada una de ellas en el momento oportuno y con la persona adecuada.