Homenaje a un insigne compositor

Allá en Uyuni, en el altiplano occidental, llega al mundo un 5 de enero de 1917 el que llegaría a ser un vate musiquero de primer orden, para que, con el pasar de los años, se integre con relevo al Parnaso criollo; estamos hablando de don Apolinar Camacho Orellana.
Es grato recordar a este insigne compositor, tomando en cuenta que este año recordaremos los 20 años de su triste desaparición. Un 4 de abril de 2002 dejó, pues, este mundo tal preclaro personaje, por suerte, él vive en nuestra memoria y en nuestros corazones, ya que ha dejado como herencia de valor supremo sus composiciones magnas, bañadas de sentimiento patrio, de nobleza criolla. Lo esencial es recordar su obra cumbre: la cueca “VIVA MI PATRIA BOLIVIA”, creación excelsa que por sí sola ya sirve para elevar a su autor a alturas de magnificencia. Esta composición es interpretada por millares de bolivianos en momentos de relieve, como acontecimientos deportivos, desfiles cívicos y otros. De la misma consistencia, bastaría que esta inmortal obra le diera a su autor el requisito pleno y suficiente para ser homenajeado por generaciones sucesivas, pero este genial compositor, nacido en Uyuni, se dio a la tarea de dar vida a muchas otras joyas musicales, nacidas de su alma y de su sensibilidad. Apolinar Camacho no requería de casos circunstanciales o de visiones telúricas para dar forma a sus composiciones, le bastaba su propia estructura sentimental para lanzar a los aires patrios ese ramo de canciones nobles que acarician el espíritu de quienes tenemos la dicha de oírlas.
Valgan estas palabras, que quizás aparezcan muy rimbombantes, para exigir justicia, en el entendido de que hasta hoy no se ha formalizado un reconocimiento real a este magnífico músico uyuninese. Uyuni, en especial, no ha desplegado con suficiencia clara un neto homenaje a este gran personaje, excepto que existe un busto descuidado que pasa desapercibido en la población. Sin embargo, propongo lo siguiente: que una Unidad Educativa, una plaza o una avenida céntrica de esta ciudad lleve con gloria y orgullo el nombre de APOLINAR CAMACHO ORELLANA. Obviamente, esta iniciativa debe ser proyectada también por autoridades departamentales y nacionales, esperemos que el 4 de abril de 2022, tengamos noticias importantes sobre el reconocimiento póstumo a este compositor inmortal.