A pesar de los argumentos expresados por el empresariado nacional, el Gobierno junto a su aliado la Central Obrera Boliviana decidió fijar un incremento de 3% al salario básico y 4% al mínimo nacional. Al respecto, el presidente de la Federación de Empresarios Privados de Tarija, Marcelo Romero, dijo que reciben la noticia como un atentado al trabajo estable, digno y sostenido.
Lamentó que autoridades y dirigentes no sepan valorar a la empresa, ya que la decisión asumida con respecto al aumento salarial, muestra que el sector emprendedor no está dentro las prioridades del Gobierno.
Aseguró que la gente apuesta por la economía del país con su emprendimiento, ya que paga impuestos y genera empleo, y lo único que hace este tipo de medidas es que las empresas se contraigan para sobrevivir.
Señaló que ya con el 1% la situación se perfilaba complicada, pero con la decisión de subir el porcentaje, lo único que se conseguirá es aumentar el desempleo y reducir el empleo formal.
Por ejemplo, Tarija se encuentra con altos índices de pobreza, y la medida no toma en cuenta esta situación, sino que mide con la misma vara a todas las regiones, lo que provocará que la situación económica de la región se complique aún mayor.
Recordó que el contrabando provoca cierre de empresas en la región y la inversión pública casi está en cero, y por ello sostiene que la decisión asumida por el Gobierno y la COB sólo causará mayor desempleo y reducirá la creación de mayores emprendimientos.
Como se recordará la COB solicitó un aumento salarial de 7% al básico y 10% al mínimo. En las reuniones realizadas entre dirigentes y el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, se planteó un aumento de 0,5% al básico y 1% al mínimo, que fue rechazado, y el martes se subió a 1,5% a ambos, que también fue rechazado.
Los dirigentes d la COB acudieron al presidente Luis Arce, y después de varias horas de debate, la noche de ayer el Jefe de Estado anunció que se llegó a un acuerdo de 3% al básico y 4% al mínimo nacional.
Los empresarios indicaron que por cada punto de incremento el gasto para el sector privado representará 53 millones de dólares, y con el retroactivo la cifra se eleva a más, por lo que deberán buscar financiamiento.
En pasado lunes, el sector empresarial señaló que no están de acuerdo con un aumento salarial, debido a que no salen de la crisis, pero aseguraron que son respetuosos de la ley.
El asesor de la Cámara Nacional de Industrias, Hugo Siles, en su presentación del aumento salarial, dijo que no sólo suben costos para el sector privado, sino que también para el Gobierno, ya que, por cada punto porcentual, el presupuesto público se incrementaría 55 millones de dólares, que bien podría destinarse a la construcción de un hospital de tercer nivel o a 55 establecimientos educativos.
MOMENTO DIFICIL
El past presidente de la Cámara Nacional de Comercio (CNC), Rolando Kempff, recordó que la economía pasa todavía por un momento difícil, ya que la reactivación está complicada, y ahora más con la invasión de Rusia a Ucrania, que provocó una crisis alimentaria y energética.
Explicó que, por cada punto de incremento del salario, esto implicará una carga económica para los empresarios de alrededor de 53 millones de dólares, y como se recordará es retroactivo a enero, lo que provocará dificultades para el sector privado, que tendrá que financiarse para pagar el monto acumulado.
Reitero que para los empresarios es importante el diálogo con todos los sectores, ya que la carga laboral es alta, y el salario mínimo nacional es uno de los más altos de la región, y es por ello que demanda equilibrio.
Esperemos que el diálogo iniciado con la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia, el pasado lunes, continúe y se hable de estos temas, como la presión laboral.
Por su parte, el nuevo presidente de la CNC, Mario Paredes, dijo que apoyan las decisiones cuando son acuerdos razonables, y esperemos que se alcance este nivel en las conversaciones entre los trabajadores y el Gobierno.