La frecuencia de la drogadicción en la población general ha aumentado considerablemente en los últimos 20 a 25 años, existen mujeres embarazadas que consumen drogas, alcohol, algunas de manera casual o por recreación, pero en muchas se presenta la adicción.
Cuando una mujer usuaria de drogas se encuentra embarazada genera una agresión al niño dentro del útero. La droga consumida por la mujer puede repercutir en el crecimiento intraútero del feto, en la adaptación adecuada del recién nacido en la vida extrauterina.
La mujer embarazada que consume drogas no utiliza una sola sustancia, sino que con frecuencia lo asocia al alcohol, al tabaco, aumentando el riesgo de causar daño al feto.
Asimismo otras mujeres se encuentran desnutridas, padecen de alguna infección como ser la hepatitis B, el VIH y no llevan un control prenatal adecuado. Estas drogas llegan a causar en el feto malformaciones congénitas, prematurez, retardo en el crecimiento físico, desarrollo neurológico anormal y síndrome de abstinencia.
Repercusiones de la drogadicción materna en los periodos del recién nacido, lactante y posteriormente
Repercusiones somatométricas. Los niños recién nacidos de madres drogadictas presentan bajo peso y talla que no son adecuados para la edad, además su cabeza es pequeña. Los narcóticos causan disminución de la irrigación de la placenta razón por la cual los nutrientes no llegan al producto, causando una restricción en el crecimiento del feto dentro del útero. Si la madre consumió marihuana en todo su embarazo, el recién nacido no solo presentará peso y talla baja, también, el perímetro de la cabeza se encontrara disminuido, existiendo además la presencia de un retraso a nivel psicomotor.
Malformaciones congénitas. Causadas por la cocaína, debido a su efecto vasoconstrictor se ha asociado a malformaciones craneoencefálicas, medulares, malformaciones en la parte distal de las extremidades, anomalías oculares, alteraciones en el tracto urinario y la piel del abdomen se encuentra arrugada y delgada.
Patología cerebral y cardiovascular. Ligada fundamentalmente a la cocaína y a las anfetaminas que causan infartos cerebrales, hemorragias intracraneales y alteraciones cardíacas.
Síndrome de abstinencia. Después del parto el recién nacido busca el aporte de droga, al cual estaba acostumbrado durante la vida intrauterina, la droga que
con frecuencia produce este síndrome es la heroína, este síndrome aparece de 24 – 48 horas después del parto, los síntomas son irritabilidad, temblor, vómitos, diarrea y rechazo al alimento.
Síndrome de muerte súbita del lactante. Las drogas que se encuentran involucradas en este síndrome son la cocaína y los opiáceos, estos niños presentan alteraciones en la respiración, problemas cardíacos y su cerebro no se encuentra maduro.
Repercusiones de las drogas durante el embarazo
Debido a que la mujer embarazada asocia el consumo de drogas al alcohol, al tabaco, su desnutrición, inadecuado control prenatal, encontramos las siguientes repercusiones:
Abortos y muertes fetales. Se encuentran presentes en las consumidoras de heroína y cocaína.
Patologías placentarias. Se asocia al consumo de cocaína y anfetaminas, estos vasoconstrictores producen la muerte del feto.
Sufrimiento fetal. Se observa alteraciones en la frecuencia cardíaca fetal que es causada por la intoxicación con cocaína, se observa síndromes de abstinencia maternos a la heroína.
Partos patológicos. Se presenta el parto prematuro que está relacionado con el síndrome de abstinencia. La cocaína y las anfetaminas llegan a producir efectos de vasoconstricción en la placenta.
