Junto a dirigentes vecinales y sociales, una delegación compuesta por servidores públicos de la Alcaldía de El Alto llegó ayer a la urbanización Los Lirios del Distrito 10, zona límite con el municipio de Achocalla, para sentar soberanía y verificar los mojones. Alertaron que no permitirán avasallamientos en la jurisdicción.
“Hacemos una inspección de nuestros mojones de delimitación de los límites, porque el Distrito 10, con todas sus urbanizaciones que se han creado, más Amachuma y Parcopata, pertenecen a la ciudad de El Alto. Estamos sufriendo avasallamientos por comunarios de Achocalla”, afirmó el secretario municipal de Gestión Institucional de la comuna alteña, Rury Balladares.
La delegación alteña –compuesta por al menos tres decenas de ciudadanos- estuvo a las 10.00 en el límite con el municipio vecino. Hicieron una ch’alla y recorrieron los puntos de delimitación. “Pedimos el respeto que se merece El Alto”, indicó Balladares.
Adelantó que las inspecciones continuarán en el Distrito 13 y que el municipio alteño no tiene problemas de límites con los vecinos de la región metropolitana. “Con el resto de los municipios estamos llegando a tratativas, pero El Alto tiene sus límites; sabemos de dónde a donde es el territorio, pero el problema son los avasallamientos”, sostuvo la autoridad del municipio.
A fines de agosto, la Alcaldía de El Alto decomisó material de construcción de supuestos loteadores en la urbanización Panorámica I del Distrito 2, que es limítrofe con el municipio de Achocalla. Trataban de edificar casas en un área de riesgo donde la municipalidad plantó árboles.
Alteños sientan soberanía en límites con Achocalla
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