Por: Aurora Yáñez
Correr largas distancias es un reto muy gratificante que te aportará innumerables beneficios. La entrenadora Andrea de Ayala ofrece algunas pautas para mejorar el rendimiento, así evitarás lesiones y será más difícil que tires la toalla.
El running puede despertar una necesidad imparable de superarse en quien lo practica. Correr largas distancias es uno de los retos más buscados por runners de todo tipo. Y, cuando se ha conseguido, lo normal es que sobren las razones para seguir superando marcas en semejante hazaña.
La mencionada entrenadora personal, especializada en gestión de proyectos y eventos deportivos y amante confesa del running, ya que participó en maratones muy importantes, no sin antes haberse preparado para ello a conciencia.
Sin embargo, como ella misma puntualiza, “correr largas distancias es ya un importante reto en sí mismo, que no necesariamente implica participar en competiciones profesionales”. Puede que tu propósito “se limite” a superar tus propias marcas. En esta entrevista descubrirás las claves para enfrentar este reto con éxito:
Aunque pueda parecer una contradicción, no vayas demasiado deprisa en la consecución de este objetivo. Lo mejor, según Andrea, es ir poco a poco y marcarse objetivos realistas. Esta es una muy eficaz manera, dice, “de evitar caer en la frustración apenas al empezar”.
Cuando tienes claro este primer requisito, lo siguiente será marcarte un plan acorde a la forma física en que te encuentres. Andrea aconseja mantener una rutina de entrenamiento 3 días a la semana, complementarlo con una alimentación saludable, respetar el descanso y no olvidarse nunca de mantener los niveles óptimos de hidratación.
Un equipamiento adaptado
a largas distancias
Andrea nos recuerda que “todas estas pautas son imprescindibles, pero insuficientes sin la vestimenta y el calzado adecuado”. En los 10 años que lleva dedicada al deporte, no deja de sorprenderse por la cantidad de runners que visten de manera inapropiada: “Sobre todo, me llama la atención que todavía hay quienes no llevan zapatillas específicas para correr”.
En este sentido, Andrea destaca el papel que desempeña el calzado, no solo para mejorar el rendimiento, sino también para evitar lesiones.
Es indispensable buscar las zapatillas más adecuadas para largas distancias, teniendo en cuenta la flexibilidad y su resistencia. Son aspectos que responden muy bien a las necesidades que implica este tipo de entrenamiento.
La amortiguación HOVR hace que las Sonic 5 sean “perfectas para correr en asfalto”, ya que “no solo reduce el impacto que supone la dureza de este tipo de terreno, sino que, además, mejora la eficiencia de carrera, devolviendo la energía y ayudándote a impulsarte hacia adelante”.
Equípate para que nada te frene
Andrea de Ayala recomienda:
– Zapatillas especiales de running.
– Sujetador deportivo.
– Camiseta sin mangas.
– Leggins muy cómodos.
Según la entrenadora, Contar con la vestimenta y el calzado específico para largas distancias ayuda a mejorar el rendimiento y evita posibles molestias y lesiones.
El empujón que te ayudará a motivarte
La experta en running, destaca que las zapatillas ideales son aquellas que tengan sensor incorporado a la suela. Las hay unas que, vía bluetooth, se conectan a la aplicación Mapmyrun, y registran, evalúan y guardan métricas específicas. Se trata de una gran ventaja, señala, “porque, al controlar la evolución, el nivel de resistencia e incluso la pisada, ayuda a mejorar el rendimiento, evitar posibles molestias o lesiones y mantener la motivación”.
No olvidemos que la tentación de tirar la toalla puede acecharle a cualquiera, tanto a principiantes como a quienes llevan ya un tiempo en esto. Para que nada nos desvíe de nuestro objetivo, Andrea recomienda seguir una serie de pautas que ayudan a potenciar la perseverancia: “En mi caso, cambiar los recorridos, marcarme objetivos a corto plazo, escuchar una lista de música que me motive o salir a correr con un amigo hacen que nunca pierda las ganas de seguir entrenando”.