El viernes 16, sábado 17 y lunes 19 de septiembre del año en curso, en Nueva York, Estados Unidos, se desarrolló la Cumbre sobre la Transformación de la Educación – TES (siglas en inglés), promovida por la Organización de Naciones Unidas (ONU), aglutinando a representantes de más de 130 países (incluida Bolivia), en sujeción a jornadas específicas; la primera de movilización, la segunda de soluciones y, la tercera de líderes.
En sujeción al sitio web de la TES (https://www.un.org/en/transforming-education-summit), la jornada de movilización se centró en el círculo de solidaridad, movimiento global hacia la transformación de la educación, diálogos intergeneracionales de los jóvenes, áreas interseccionales, charla con el secretario general de la ONU, António Guterres, declaración de la juventud, construcción de un movimiento global y trazando el camino de cambio.
La jornada de soluciones se enmarcó, en el enfoque holístico y equitativo para la transformación digital; asociación para la educación ecológica; reimaginar el aprendizaje; niños hambrientos, reflejo en el fracaso del sistema educativo; un planeta más sano; escuelas y generaciones sanas, entre otros.
La jornada de líderes, se circunscribió en el debate en mesas redondas, en concordancia con la educación en situaciones de crisis, acciones transformadoras para los estudiantes, transformación digital, fomento de la igualdad de género y el empoderamiento de las niñas y las mujeres, además de la financiación para la inclusión de políticas educativas en el mundo.
Consiguientemente, los más 130 países que participaron en la Cumbre de la ONU, exhortan a reiniciar los sistemas educativos, ofreciendo una nueva esperanza a los niños y jóvenes del mundo para un futuro mejor, ante los 147 millones de estudiantes que han perdido más de la mitad de su aprendizaje presencial, desde 2020, por causa de la pandemia por el COVID-19.
Por su parte, el secretario general del ONU, resaltó que, la educación es un derecho humano fundamental, impulsora para el avance del desarrollo social, económico, político y cultural, empero, acosada por las desigualdades y luchando por adaptarse a las necesidades del Siglo XX, exhortando a la comunidad internacional prestar la atención que merece para la trasformación educativa.
En consecuencia, la declaración de la Cumbre de la ONU, evoca que: “Debemos avanzar juntos, centrándonos en las acciones tangibles allí donde más importa: sobre el terreno, en las aulas, y en la experiencia de los profesores y estudiantes por igual”. A partir de una continua movilización mundial.
Por tanto, las conclusiones de la Cumbre de la ONU, apuntan a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030, hacia una educación inclusiva, equitativa, de calidad y un aprendizaje a lo largo de la vida para todos.
El autor es Magister en Políticas de Formación Docente.