El debate académico Como estrategia para trabajar las necesidades educativas actuales

Por: Lic. Héctor Molina Angulo

Recordemos que…

El debate es una forma de discusión formal y organizada que se caracteriza por enfrentar dos posiciones opuestas sobre un tema determinado. En otras palabras, el debate es el intercambio de opiniones críticas, que se lleva acabo frente a un público y con la dirección de un moderador para mantener el respeto y la objetividad entre ambas posturas.

Pasos para la elaboración del debate

Antes del debate

1. Elegir un tema de interés que genere controversia.
2. Preparar los contenidos teóricos.
3. Nombrar un coordinador o moderador encargado de determinar el esquema de trabajo, y a un secretario, si fuera necesario.
4. Formar grupos a favor y en contra de los planteamientos.
5. Preparar el material de apoyo (imágenes, textos impresos o en Power Point, acetatos, etc.)

Durante el debate

1. Iniciar presentando las posturas y los participantes. Dar una pequeña introducción al tema. Mencionar tanto las instrucciones como las reglas del debate. Estos puntos están a cargo del moderador.
2. Conceder la palabra a cada uno de los participantes o, en todo caso, a un representante de cada posición, de forma ordenada y respetuosa.
3. Abrir la sesión de preguntas y respuestas. Hacer la pregunta y conceder la palabra a cada participante que así lo desee.
4. Llegar a un consenso sobre las conclusiones.
5. Anunciar al “ganador” o la posición dominante, aunque esto no es obligatorio.

Reglas para aplicar durante el debate

Existen ciertas normas a seguir en el transcurso de un debate que deben ser respetadas por todos los integrantes del mismo para su desarrollo normal, las cuales son:

*  Respetar el tiempo de habla asignado por el Moderador. No hablar al mismo tiempo que otros y levantar la mano para pedir la palabra.

*  Hablar desde el respeto. No gritar, insultar o faltar al respeto a los compañeros o a sus opiniones. Tampoco faltar al respeto a grupos o colectivos sobre los que se debaten, ni generalizar o afirmar sin justificación.

*  No juzgar – No burlarse de la intervención de nadie. Somos libres de expresar nuestro punto de vista, así como no debemos juzgar las opiniones de los demás.

*  Propuestas en positivo. Argumenta tus ideas y no centres tu intervención en criticar las opiniones del oponente.

*  Ser claro y breve. Se recomienda argumentar de manera clara y ser breve en las intervenciones, todo ello dentro del tiempo estipulado.

*  Respetar los tiempos. Respetar los tiempos de intervención, así como el del equipo contrario.

*  Ser objetivo.

*  Ser tolerante respecto a las diferencias.

*  Respetar el turno de la palabra.

*  Dejar intervenir a los demás.

*  Entre otros.

Asimismo se sugieren las siguientes recomendaciones para los participantes:

*  Claridad. Evitar el uso de términos que puedan ser mal interpretados por la parte opositora.

* Evidencia. Evitar en la argumentación frases como: “De acuerdo a…”, “El texto dice…”, “La mayoría de las personas creen…”. Sustentar con hechos reales las ideas expuestas.

* Emocionalismo. Evitar el uso de expresiones que causen reacciones airadas en la parte opositora, tales como: ¡Liberal!, ¡Conservador!, ¡Socialista!, ¡Comunista!, ¡Hippy!, ¡Fascista!, etc.

*  Causalidad. Evitar conclusiones que conlleven Falacias.

*  Seguridad de la información. Constatar en varias fuentes la credibilidad del tópico a investigar.

* Entender los argumentos de los oponentes. Se parte de la base de que la parte opositora también posee razón en lo que expone; así se pueden descubrir algunos conceptos que pueden ayudar a mejorar el argumento.

Seis claves para impulsar el debate en aula

A pesar de las evidentes ventajas que presenta el debate en clase, en ocasiones los alumnos no están completamente abiertos a realizar esta nueva metodología. Esto se debe al miedo o timidez de hablar en público y defender tus ideas frente a otros. Es importante transmitirles seguridad y tranquilidad. A continuación te damos algunos consejos para fomentar la participación de los alumnos:

1 Se debe escoger temas de interés común. Elegir temas de actualidad que sean interesantes para el grupo. Pueden ser asuntos polémicos que llamen su atención, sobre actividades que les gusten o temas actuales, entre otros. Sería también una buena opción elegir los temas entre todos.

2 Realizar preguntas es inevitable si se quiere el éxito del debate. Haz preguntas sobre sus afirmaciones y pídeles que las fundamenten. De esta manera los alumnos estarán más involucrados en el debate. También habrá un mayor intercambio de opiniones y el debate se mantendrá sólido y centrado en el tema principal.

3 Un buen grupo siempre fomenta la escucha y la consideración de otros puntos de vista. Los debates no consisten en dar una opinión tras otra. Se debe tener una escucha activa en todo momento. Los debates consisten en defender tus ideas, escuchar lo que dicen los compañeros, y aportar nuevos argumentos teniendo en cuenta lo que se ha dicho hasta el momento. Además, deben entender que no habrá una única respuesta correcta, todos los puntos de vista con las argumentaciones oportunas son válidas.

4 Controlar los tiempos es vital. El debate no debe ser demasiado largo, para no perder dinamismo. Así mismo, si es demasiado corto podrían perderse ideas importantes o no profundizar lo necesario en el tema. Asegúrate de dar turnos de palabra para que todos participen y pausar cuando sea necesario, además de controlar y advertir de los tiempos de intervención.

5 Se debe buscar siempre la reflexión. Haz preguntas, profundiza en sus respuestas, pídeles argumentaciones, animales a retomar afirmaciones interesantes, señala las contradicciones y afirmaciones sin justificar, animales a plantearse otro punto de vista, evita que se aferren a sus ideas o argumentos solo por conservar su posición, haciéndoles saber que está bien cambiar de opinión con motivos fundados. De esta manera se mantendrá un debate dinámico, abierto y respetuoso.

6 Se debe llegar a extraer conclusiones. En ocasiones será imposible llegar a una solución única de la polémica. Aun así, es importante saber las ideas planteadas y las conclusiones a las que se han llegado. Los participantes podrán ver así la utilidad del proceso del debate y su aportación.