Repetir campañas de salud ante coronavirus

Son tan débiles las estructuras del ser humano, que se resquebrajan ante persistentes ataques del coronavirus, más conocido por Covid-19 en todo el mundo. Nuevamente va creciendo la cantidad de afectados por el ataque del virus que parece tener disposición para asentarse definitivamente en seres humanos.
Empezando por países desarrollados, se creyó que el coronavirus ya estaba superado, pero nuevos embates empezaron a cobrar víctimas entre quienes participaron en jolgorios y otras manifestaciones festivas, sin mantener las medidas de salud recomendadas por organismos de salud. Por ello es necesario seguir adoptando precauciones, como usar mascarillas y protectores, evitar reuniones masivas. Es decir, impedir todo lo que signifique reapertura a dicho mal. Si países ricos y desarrollados han podido resistir los ataques pandémicos, habrá que establecer cuánto tendrán que soportar los pueblos pobres, que están muy lejos de contar con los medios que poseen quienes tienen capacidad para enfrentar con éxito al Covid-19.
Escuelas, colegios, estadios, asilos, universidades y sitios de concentración popular tienen que adoptar medidas para evitar los contagios. Son niños, jóvenes y ancianos los más expuestos al mal que se agrava por la falta de medicamentos.
Así los hechos: cuando se pensaba que el coronavirus había sido vencido, retorna a pasos agigantados y lanza un desafío para combatirlo hasta que desaparezca. En consecuencia, gobiernos e instituciones deberán esmerarse en proveer de lo necesario para evitar que aumente la cantidad de enfermos, lo que sería muy lamentable. Las experiencias pasadas tienen que ser más que suficientes para que padres de familia, maestros y todas las personas mayores adopten las medidas más convenientes para vencer la batalla por la salud, para que, finalmente, se triunfe sobre el virus que ya causó numerosas víctimas en todo el mundo.