La Constitución Política del Estado define en el Artículo 158. I que “Son atribuciones de la Asamblea Legislativa Plurinacional, además de las que determina esta Constitución y la ley: Paragr.13. Aprobar la enajenación de bienes de dominio público del Estado”. La Ley 1.670 del Banco Central de Bolivia dispone en el Art.16º que “El BCB administrará y manejará sus Reservas Internacionales, pudiendo invertirlas y depositarlas en custodia, así como disponer y pignorar las mismas, de la manera que considere más apropiada para el cumplimiento de su objeto y de sus funciones y para su adecuado resguardo y seguridad. Podrá, asimismo, comprar instrumentos de cobertura cambiaria con el objeto de reducir riesgos. En caso de la pignoración del oro, ésta deberá contar con aprobación legislativa”. Por ello el Art. 7 del proyecto de Oro es INCONSTITUCIONAL, pues señala que “oro adquirido, será refinado en el exterior, será aprobada por su directorio”, sobreponiéndose a la CPE.
Según el último reporte del Banco Central de Bolivia (BCB), las RIN llegaron a $us 3.872 millones, de esa cantidad $us 620 millones están en dólares en efectivo. Es la cifra más baja de los últimos 20 años. Las RIN llegaron a su nivel más alto en diciembre de 2014, cuando se ubicaron en $us 15.084,2 millones, de esta cantidad $us 13.462,3 millones estaban en divisas. Para diciembre de 2022, el stock en efectivo cayó a $us 709 millones, es decir, un desplome del 94,7%, de los cuales nuestro oro compone más del 50% de las reservas en oro, los derechos especiales de giro, los activos en divisas (moneda, depósitos y valores).
Nuestros ahorros, plasmados en las Reservas Internacionales, han sido y siguen siendo despilfarrados durante 17 años: en obras como Museo de Morales, canchitas en vez de hospitales, empresas deficitarias para “crear empleo para sus vasallos”, etc., incremento de servidores públicos, en 2006 eran 2.000, en 2023 llegan a más de 5.000; se gasta más de Bs.130.000 millones por incremento del gasto para importar combustibles, generando déficit fiscal. El BCB utilizaría las reservas para financiar al Gobierno y pondría en peligro la estabilidad del poder adquisitivo, tomando en cuenta que hay un problema de divisas, porque tiene exceso de gasto por la falta de ingresos, y sin seguridad jurídica para la inversión extranjera, se seguirá perdiendo dólares.
La Ley del Oro que pretenden aprobar los oficialistas, quita competencias a la Asamblea Legislativa, por tanto, es inconstitucional. Esta ley no solo será para comprar el oro producido en Bolivia, sino para vender (pignorar, empeñar), nuestros ahorros del RIN, con libre albedrío por el gobierno masista. En consecuencia, será más fácil y viable con el oro existente y certificado; y por el contrabando del oro peruano en Bolivia, esta medida puede perjudicar, en lugar de fortalecer las RIN.
A enero, las RIN del BCB solo quedan en $us.620 millones y Bolivia debe pagar por concepto de servicios de la deuda al capital $us.520 millones, 150 millones de intereses, bonos soberanos $us.180 millones con tasas de interés más alta, pero no aceptaron la recompra y se devolverá en agosto. El BCB está desesperado porque ofrece los Bonos Remesa para atraer divisas de bolivianos en el exterior, y quiere comprar dólares del sector exportador con un mayor precio.
Así se muestra que “el modelo económico productivo comunitario” FRACASÓ y solo ha servido para enriquecer a las elites del MAS, ya que hoy nadie quiere invertir en Bolivia, por tanto, no ingresa dólares, para contradecir lo que el gobierno tanto alardea, en cuanto al manejo de la economía nacional. Y es que el MAS hizo gas el gas, sigue creciendo el déficit fiscal que provoca la caída de las reservas internacionales y pérdida de dólares, por lo que se recurre a la compra de dólares y a otras medidas estrictamente capitalistas para sostener una mentira. La compra de oro se haría a cooperativistas y empresas chinas y NO pagaran el IVA ni el IT. Ese sector exportó $us 2.600 millones en 2021 y pagó solo $us 100.000 y recién tienen una tasa impositiva de 4,8%.
Las importaciones de $us 4.000 millones, se incrementaron en 94%, de las cuales el 71% corresponde al sector privado, por tanto, es fuga de divisas y en un año podríamos quedarnos sin estas reservas. Y es que al comprar oro el BCB pagará en bolivianos, que se gastará en bienes y servicios, lo que aumentará las importaciones y disminuirían las divisas en el BCB.
Si las personas se enteran de la necesidad de dólares, con el funcionamiento pleno de la Gestora en mayo, cuidarán sus divisas y van a “desbancarizar” la economía. Para evitar ello se deberá eliminar o reducir el ITF, por ser un factor que no incentiva el ahorro en dólares.
La autora es Abogada-Economista, ex Asambleísta Constituyente.