Si retornara el tiempo de la UDP, pensando hipotéticamente, ¿en qué situación nos encontraría? Con una economía débil y una deuda externa que sobrepasa los 19.000 millones de dólares (1). Quizá significaría el desastre, en la presente coyuntura, ya que tienden a agotarse los recursos gasíferos, que marcaron aquella época de la “Bolivia Saudí”. Ahora las instancias respectivas conminan, a la población, a ahorrar el uso de ese energético, ante la caída de producción (2). En consecuencia: nuestro único bastión económico es la minería, seguido por el rubro de los productos no tradicionales.
Quizá sería la devastación, particularmente para la gente inmersa en la pobreza. La pandemia fue una experiencia muy adversa, debido que generó más pobres, y el cierre de entidades que proporcionaban trabajo. Y que apenas retoman sus actividades, con el fin de contribuir a la reactivación económica.
Entonces, siempre refiriéndonos a los inicios del 80, del siglo pasado, se imponía en el Poder la alianza, izquierdista, UDP, constituida por el MNR-I, Movimiento de Izquierda Revolucionaria y Partido Comunista de Bolivia. Los problemas internos, las incoherencias a tiempo de asumir decisiones y otros desatinos, hicieron inviable a ese gobierno, que, a comienzos de su gestión, gozaba con el masivo apoyo popular. La deuda externa alcanzaba a 837 millones de dólares, en diciembre de 1984, según afirmó el representante del MIR, Samuel Doria Medina (3). “¿Cómo vamos a salir de la crisis? –se preguntaba el delegado del MNR-I, Franklin Bustillos Gálvez–. En primer lugar, un punto central clave, es precisamente el problema de la deuda externa, para su tratamiento, planteamos la condonación, en caso de que no fuera posible la condonación, volver a una situación del capital original, simplemente a una situación que implique una postergación de los pagos, mínimo por unos 20 años; porque el país para salir de su estado de estancamiento económico, de recesión-inflación, necesita acelerar, reactivar la producción, el aparato productivo; además, como vía para combatir el proceso inflacionario interno, que nos está destruyendo y cuya dinámica propia además se va a hacer incorregible si no se ataca el problema de la oferta; este es un aspecto central para el país”. (4)
Hoy el que tiene suerte, consigue un empleo digno y seguro. Profesionales, con título académico, no pueden lograr cargos en la administración pública y privada. Los artículos comestibles suben, paulatinamente, de precio. El comercio informal se multiplica, buscando los cauces de subsistencia. Los empresarios confrontan serios problemas, como consecuencia del contrabando que hace de las suyas.
En suma: Dios no quiera que retornen los tiempos de la UDP.
NOTAS
(1) “Deuda externa pasa los $us 19.000 millones”. EL DIARIO, La Paz – Bolivia, 27/1/2023.
(2) “Promueven uso eficiente del gas ante caída de producción en el país”. EL DIARIO, La Paz – Bolivia, 13/2/2023.
(3) “La Deuda”. Producciones CIMA, La Paz – Bolivia, julio de 1985. Pág. 95.
(4) Ídem, pág. 133 y 134.