sábado, septiembre 28, 2024
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Ajedrez, una buena experiencia en la educación

Rogers Choque Sirpa

En la gestión anterior en las unidades educativas se realizó el primer torneo de ajedrez “Jaque mate a la violencia”. En esta gestión se lo insertó en el nuevo currículo como un juego de mesa en el área de educación física y deportes. Es una estrategia pedagógica para la formación del desarrollo integral del estudiante.
Ante la convocatoria para el Torneo de Ajedrez en unidades educativas, los estudiantes se sintieron motivados para participar, tomando iniciativas para aprender las reglas del ajedrez, con ayuda de los maestros, y conocer los movimientos de las piezas. Los que ya tenían base fueron investigando diferentes estrategias para realizar jaque mate; es agradable ver cómo los estudiantes llegan a la escuela portando su tablero de ajedrez, aprovechando el recreo o la salida de clases, para jugar alguna partida con algún compañero de curso.
El ajedrez en las unidades educativas desarrolla el razonamiento lógico matemático, por lo que el estudiante potencia su capacidad, lo cual se evidencia en la forma de explicar, de justificar por qué movió cada pieza, en qué pensó antes de hacer cada jugada, acatando las normas que no son negociables.
El ajedrez fomenta valores, como la humildad. Vimos a estudiantes darse la mano al iniciar y al terminar una partida, además de mostrar respeto por su rival, reconociendo, aceptando y valorando las cualidades o debilidades de sus oponentes circunstanciales.
Fomenta la tolerancia, al permitir que otras personas puedan pensar de forma diferente, y la paciencia, porque se dan cuenta de que las cosas no se las consigue cuando uno quiere, sino que es necesario esperar a que llegue la oportunidad.
Cada estudiante asume las decisiones que toma, ya que no necesita que otro le diga qué movimientos hacer. Juega de manera responsable, asumiendo las consecuencias de decidir los movimientos de las piezas y los errores cometidos. Algunos estudiantes se sienten felices al ganar una partida, pero también se observa cómo algunos estudiantes al cometer errores sollozan, pero la experiencia ganada les deja un buen aprendizaje.
El ajedrez favorece el pensamiento crítico y de análisis, además de que ayuda a ser más conscientes, ya que los diferentes movimientos del ajedrez se asemejan a las diferentes situaciones que se vive a diario, que ameritan una toma de decisiones. Una decisión debe ser muy bien pensada, porque origina otras situaciones. Las situaciones de jaque como advertencia se asemejan a los problemas que se tiene, por lo que se debe buscar salidas. Además, es importante rescatar el pensamiento divergente de los estudiantes, ya que buscan diferentes opciones o estrategias para hacer jaque mate, o buscar la solución ante un jaque.
Concluimos con que el ajedrez en las unidades educativas lleva consigo muy buenas experiencias, por los beneficios para los estudiantes, ya que ayuda a desarrollar diferentes capacidades y fomenta muchos valores, los cuales pueden ser aplicados a la vida cotidiana.

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