El Tribunal Séptimo de Sentencia Penal de La Paz determinó declarar en rebeldía y emitir orden de aprehensión contra el exmayor de Policía, David Vargas, por el caso denominado “febrero negro” de 2003, informó ayer el abogado Wilfredo Chávez, denunciante.
El jurista explicó que Vargas fue declarado en rebeldía por no haber concurrido a la audiencia de juicio señalada para ayer.
“Pretendió justificar su ausencia con un viaje a la República Argentina como Secretario de Relaciones Internacionales de la Confederación Universitaria de Docentes (CUD)”, precisó.
En ese marco apuntó que además de la orden de aprehensión, se pidió la aplicación de medidas cautelares, anotación preventiva de sus bienes, mandamiento de arraigo y nombramiento de defensor público, para la audiencia que fue programada para las 9.00 horas del 5 de junio de 2023.
Vargas recordó que la semana pasada ha presentado su excusa por obligación laboral, pero le llama la atención la manera arbitraria que se decidió emitir la rebeldía en su contra.
DATOS
El anuncio de un posible impuesto a los salarios fue el detonante del conflicto social que estalló en 2003, cobrando la vida de al menos 30 personas.
Tuvo que pasar 20 años para dar pie al inicio del juicio oral por el caso denominado “febrero negro”, respecto a hechos sucedidos entre el 12 y 13 de febrero de 2003, donde están acusadas 19 personas, entre las cuales hay militares, policías y civiles.
Los policías se amotinaron y se generó enfrentamiento con Fuerzas Armadas, mientras surgieron hechos de saqueo y vandalismo en las calles, que después fueron reprimidos.
Vargas fue parte del motín policial que se registró en esas fechas. El exmayor indicó que se le acusa de delitos cuya pena llega a los cuatro años.
Afirmó que se acogió a una amnistía, pero esto no se respeta. Acusó a los fiscales de seguir órdenes políticas.