Freddy Villca Vasquez
Las cámaras de vigilancia que antes eran instaladas sobre todo en tiendas comerciales, bancos, oficinas públicas y otras actividades económicas permiten proporcionar cierta seguridad en el momento de investigar algún ilícito, como robo, robo agravado, hurto u otro factor que pone en riesgo el derecho de personas o la propiedad privada.
En la actualidad, estos equipos tecnológicos dejaron de ser una exclusividad, para ser adquiridos con diferentes costos y niveles, los cuales pueden ser instalados dentro de los domicilios, en la parte exterior, en medio del patio y en cualquier espacio que las familias deseen, con la finalidad de tener registros de todo lo que se desarrolle dentro o fuera de cada vivienda.
Las cámaras de seguridad de viviendas privadas, lugares públicos o de centros comerciales sirvieron a instancias de investigación de la Policía Boliviana, para identificar a personas involucradas en hechos ilícitos, en Santa Cruz de la Sierra, Cochabamba, El Alto, La Paz y otras ciudades, donde se evidenció la presencia de asociaciones delictivas que efectuaron robos y robos agravados.
En El Alto, centros comerciales, entidades bancarias y hasta casas de cambio llegaron a ser afectados por la intervención de asociaciones delictivas, cuyos integrantes, haciendo uso de armas de fuego, sorprendieron a los propietarios de estas entidades, quienes fueron víctimas de robo agravado. Estos hechos llegaron a ser esclarecidos gracias al uso de las cámaras de seguridad, las mismas que no solo fueron instaladas por los propietarios de esas actividades económicas, sino sobre todo de las casas vecinales, mostrando con claridad el accionar de las personas dedicadas a diferentes ilícitos.
En el caso de Santa Cruz, las cámaras de seguridad también permitieron esclarecer hechos no solo de robo, sino incluso de secuestros, atropellos a peatón con fuga y hasta tentativa de sicariato. En Cochabamba, los robos que suelen presentarse incluso en las calles, con la sustracción de celulares, el robo de mochilas, carteras y otras pertenencias, también llegaron a ser evidenciadas y publicadas tanto en medios de comunicación, como en redes sociales.
Ante el incremento de hechos ilícitos y las diferentes modalidades que generan inseguridad ciudadana en muchas ciudades capitales del país, las instancias de investigación recomiendan que los ciudadanos, en sus viviendas procedan a la instalación de cámaras de seguridad. Es decir, tanto en el interior de sus domicilios, como en la parte exterior, con la finalidad de poder facilitar evidencias para dar con los responsables de diferentes ilícitos.
Las cámaras de seguridad, así como los GPS, son nuevas tecnologías que incluso pueden ser aplicadas mediante programas, para que los propietarios de viviendas, puedan controlar sus casas, desde sus celulares y, de esta manera, prevenir algún hecho irregular o la comisión de algún delito. Por todo ello, las cámaras de seguridad dejaron de ser un instrumento exclusivo, para convertirse en una herramienta de utilidad general.