La Cámara Nacional de Industrias (CNI), mediante un pronunciamiento, expresó su preocupación por los hechos ocurridos en los últimos días relacionados a enfrentamientos entre las fuerzas del orden y grupos armados delincuenciales internacionales del contrabando, demostrándose una vez más que este ilícito no sólo es un problema nacional, sino que involucra a los demás países fronterizos.
Asimismo, el documento se refiere al penoso incidente en el que el propietario de un camión robado en Chile, el que fue encontrado en Challapata, fue acribillado por estos delincuentes, mientras intentaba recuperar su motorizado, es uno de los tantos riesgos que fueron advertidos los pasados días en un foro organizado por los industriales y empresarios de Bolivia, Chile y Perú.
Con este suceso se demuestra algunas de las conclusiones del evento que enfatiza “la necesidad de que nuestras autoridades fronterizas, policiales y otras estén intercambiando información de manera permanente, evitar que este ilícito continúe y se evite el derramamiento de sangre, además que el compromiso de cada Estado debe ser combatir el contrabando en el país de origen.
Los industriales, en este contexto, reiteramos a las autoridades del Gobierno rearticular de manera urgente el Consejo Nacional de Lucha Contra el Contrabando creado en 2004, para tomar acciones centrales y estructurales contra este ilícito.
Recordemos que el contrabando representa más de 3.331 millones de dólares anuales y una evasión tributaria a las arcas fiscales de 930 millones de dólares (IVA importaciones y gravamen arancelario), impactando sobre 38,000 industrias y poniendo en riesgo más de 600,000 fuentes de trabajo industrial a nivel nacional.
USO DE ARMAS DE FUEGO
Por otro lado, luego de recuperar en el departamento de Oruro un camión robado en territorio chileno, en medio de una acción violenta con el uso de armas de fuego, las autoridades bolivianas coordinan y realizan acciones con sus similares de Chile, destinadas a la lucha contra el crimen organizado en la frontera.
El fiscal departamental de Oruro, Aldo Morales, informó que actualmente se ejecutan acciones destinadas a erradicar a estos grupos delictivos, principalmente relacionados con el robo de vehículos en Chile y su posterior comercialización en Bolivia.
“Se está haciendo un trabajo coordinado con la Policía y la Fiscalía de Chile, se está haciendo acciones coordinadas las cuales no se va a dar a luz, a efectos de cortar los grupos criminales tanto del lado chileno como boliviano”, declaró a Unitel.
El fin de semana, se dio un desenlace violento cuando una familia chilena, que sufrió el robo de un camión, recuperó su vehículo en inmediaciones del municipio de Challapata (Oruro) y, posteriormente, fue atacada por un grupo armado. El chofer y dueño del carro, Mario Marañao, resultó herido, mientras que se logró la aprehensión de 14 personas.
El viceministro de Régimen Interior, Jhonny Aguilera, informó que los autores de los disparos fueron identificados como Hipólito Mamani y Omar Mamani Mananillo.
Las investigaciones aún están en curso, con el despliegue de 250 efectivos policiales en el sector de Challapata, para identificar al grupo delictivo y realizar acciones conjuntas con autoridades chilenas.
Aguilera afirmó que el trabajo de los policías está destinado a “futuro efectuar operaciones que, indudablemente, tienen que tener un carácter conjunto (con Chile) y es que sabemos que existen entidades de nuestro Estado destinadas al combate contra este flagelo en el área fronteriza”.
Por su lado, el cónsul de Chile en Bolivia, Fernando Velasco, expresó su satisfacción por las acciones desplegadas por autoridades bolivianas para la recuperación del vehículo robado en su país, pese a haberse registrado un “trágico episodio” en el que una persona resultó herida.
“Puede ser una ventana de oportunidad e inicio para que las autoridades de ambos gobiernos podamos empezar a dialogar y conversar de estos temas tan preocupantes que ocurren en nuestra frontera común”, sostuvo la autoridad diplomática chilena.