Después de que autoridades argentinas informaron que una avioneta con matrícula boliviana CP-3123 se precipitó con 324 kilos de cocaína, el periódico Clarín de ese país reportó ayer que el clan Lima Lobo estaría detrás del cargamento.
“Según fuentes consultadas por Clarín, ellos serían los dueños (al menos los dueños originales) del cargamento de 324,800 kilos de cocaína encontrados en la avioneta Cessna que, el martes por la tarde, se estrelló en un camino vecinal cercano a la localidad chaqueña de Avia Terai”, dice la nota publicada por Clarín y firmada por la periodista Virginia Messi.
Según el reporte, la avioneta iba tan cargada de droga que cuando intentó aterrizar se desestabilizó y cayó. Sus dos ocupantes lograron escapar corriendo y subirse a una camioneta azul que los estaba esperando.
MANO ABIERTA
La publicación señala que en el lugar, dentro de la avioneta, quedaron 10 bultos grandes llenos de cocaína. Cada uno tenía 30 panes. Nueve de esos bultos llevaban ladrillos con el logo de una mano abierta. El restante llevaba el dibujo de un hombre con barba.
De acuerdo a las primeras informaciones la avioneta Cessna 210 modelo Turbo Centurión II (matrícula boliviana CP-3123) había sido robada el domingo en un aeroclub de La Paz, Bolivia.
Sin embargo, fuentes de la investigación argentina relativizaron esto ya que la misma avioneta aparece fotografiada en una investigación iniciada hace tres años.
“Según pudo saber Clarín, en plena pandemia de covid-19, la Gendarmería comenzó a trabajar con las autoridades bolivianas la línea de los Lima-Lobo en un expediente que quedó a cargo de la jueza federal de Chaco Zunilda Niremperger”, señala la publicación.
El accidente de la tarde del martes en Avia Terai precipitó un poco los tiempos de la causa que apunta a este clan súper poderoso que hace décadas manda cargamentos a Brasil y en los últimos años sumó en sus rutas a Argentina y al norte de Uruguay.
LOS LIMA LOBO
“La familia Lima-Lobo comenzó a ganar prominencia en los años ’90, estableciendo su base de poder en el municipio de San Joaquín, departamento de Beni, al norte de Bolivia, cerca de la frontera con Brasil. Desde allí comenzaron a suministrar cocaína a grupos narcotraficantes de Colombia y Brasil, entre ellos el Primer Comando de la Capital (PCC), según Interpol y el ministro del Interior de Bolivia”, sostiene In Sight Crime, un medio especializado en la investigación del crimen organizado”, dice el Clarín.
“Al parecer, el grupo contaba con una flota de aviones y pistas de aterrizaje clandestinas, así como con otras rutas terrestres y fluviales, para enviar cocaína a través de la frontera con Brasil, según el jefe de la Policía boliviana, Jhonny Aguilera. Una vez allí, el producto toma dos direcciones: a las principales ciudades para consumo interno, y hacia puertos marítimos estratégicos, donde se carga en buques portacontenedores con destino al lucrativo mercado europeo”, agrega la nota dedicada íntegramente a los carteles de la droga en Bolivia.
DATOS
En la investigación argentina hay dos antecedentes que se vinculan con la avioneta de Avia Terai. El primero es de fines del año pasado cuando una avioneta del aeroclub de Chaco, valuada en 118 millones de pesos, fue robada en la madrugada de Navidad. Según el GPS interno de la aeronave, la llevaron a Bolivia.
El hecho más reciente es de enero, cuando cinco personas murieron tras caerse la avioneta que habían robado del aeroclub de la ciudad chaqueña de Villa Ángela.
GOBIERNO
Por su parte, el viceministro de Defensa Social, Jaime Mamani, informó que el dueño de la avioneta es Lino L. T, quien recuperó la aeronave el 28 de junio, en medio de irregularidades de un fiscal, luego de que fue confiscada por un vuelo sin autorización que realizó en mayo con destino a Paraguay.
Mamani informó que luego de recibir información de autoridades argentinas, corroboraron que se trata de una aeronave que salió de país el 23 de mayo de Bolivia con rumbo a territorio paraguayo, sin autorización ni plan de vuelo.
Por ese motivo, con un requerimiento fiscal, se decomisó la avioneta en el aeropuerto de Puerto Suárez, a objeto de llevar adelante una investigación.
El Viceministro de Defensa Social explicó que resulta extraño que el fiscal asignado al caso haya pedido, el 12 de junio, que el personal del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) realice el microaspirado de la aeronave para verificar si fue utilizada para el transporte de droga y no así al personal antidrogas de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico.
Mamani agregó que el resultado de la pesquisa dio negativo a transporte de cocaína, por lo que la aeronave fue devuelta a su dueño, por orden fiscal, el 28 de junio de este año, a poco más de un mes de haber sido sorprendido en un vuelo irregular.
En ese marco, el funcionario anunció que iniciará las acciones legales correspondientes en contra de las personas que tienen responsabilidad en este caso, para que se aplique “todo el peso de la ley” y se les castigue.