Los enfrentamientos en Ain al Hilweh, el mayor campo de refugiados palestino de Líbano, continúan por tercer día consecutivo a pesar de un alto el fuego acordado entre las partes durante una reunión de mediación celebrada el fin de semana en la ciudad libanesa de Sidón.
Uno de los representantes libaneses que estuvo presente en el encuentro, Usama Saad, confirmó a DPA que las partes han firmado una declaración conjunta de alto el fuego y acordaron iniciar una investigación para esclarecer los detalles de la muerte del comandante Abu Ashraf al Armushi, detonante del conflicto.
Al Armushi, vinculado al movimiento palestino Al Fatá –el partido del Gobierno palestino–, sufrió una emboscada mientras se encontraba con varios de sus ayudantes. Los enfrentamientos han dejado hasta ahora al menos seis muertos y graves daños a dos escuelas de Naciones Unidas, con capacidad para 2.000 estudiantes, y que permanecen temporalmente suspendidas.
El campamento, que se encuentra a las afueras de la ciudad de Sidón, en el sur del país, es prácticamente una ciudad sin ley y es conocido por los enfrentamientos entre facciones palestinas que operan en el lugar, donde viven 54.000 refugiados palestinos.
Los ocasionales combates entre facciones palestinas e islamistas enfurecen todavía más a una población libanesa que está marginando cada vez más a los casi 500.000 palestinos refugiados en el país, escenario de una gravísima crisis económica. (DPA/EP)