Queridos lectores, hoy por hoy, en el apasionante mundo de la gastronomía boliviana, hay ingredientes que se alzan como auténticas joyas culinarias, no solo por su sabor, sino también por su arraigada historia y su versatilidad en la cocina. Dos de estos tesoros son la yuca y el plátano, cuyas raíces se hunden en la historia y las tradiciones de Bolivia. Hoy, nos sumergiremos en un viaje culinario único al corazón de nuestra nación, explorando esta receta excepcional de Torta de yuca y plátano con dulce de leche, una delicia que encarna la riqueza de la cocina boliviana.
La yuca (Mahinot esculenta), conocida también como mandioca o cassava en otras partes del mundo, ha sido un pilar en la dieta boliviana durante siglos. Originaria de América del Sur, este tubérculo se ha adaptado perfectamente a la tierra fértil de Bolivia. Sus raíces, una vez cocidas, se vuelven tiernas y su sabor suave y ligeramente terroso es un lienzo en blanco para la creatividad culinaria. En Bolivia, la yuca es un ingrediente esencial en platos como el zonzo de yuca y el popular pastel de yuca, conocido por su cremosidad y su capacidad para absorber los sabores de otros ingredientes.
El plátano (Musa paradisiaca), hermano cercano del banano, es otro regalo de la naturaleza que prospera en Bolivia. Tenemos tantas variedades y tamaños que aportan texturas y sabores tan diversos que cualquier persona extranjera amaría y casi que no tendría la oportunidad de terminar de probar todas las variedades.
Ya sea frito, cocido, o como base de postres, los plátanos aportan una dulzura natural y una textura reconfortante a las preparaciones. En el país, el plátano es parte integral de platos emblemáticos como el majao, que brinda una combinación de sabores sorprendentemente deliciosa.
Estos ingredientes no solo son elementos culinarios, sino que también están profundamente entrelazados con la identidad y las costumbres bolivianas. En el día a día, la yuca es un ingrediente fundamental en la mesa como acompañamiento sustituyendo al pan. Además, el plátano es una presencia constante en las mesas de Bolivia, desde el desayuno hasta los postres, en una variedad de platos que hacen eco de la riqueza de nuestra cultura gastronómica.
La yuca es una fuente de carbohidratos y fibra, mientras que el plátano aporta una gran cantidad de potasio y vitaminas. Juntos, estos ingredientes brindan una combinación nutritiva y deliciosa en esta Torta de yuca y plátano con dulce de leche. No solo es un placer para el paladar, sino también un regalo para la salud.
Así que, queridos lectores amantes de la gastronomía, los invito a explorar esta maravillosa receta que rinde homenaje a la riqueza de la cocina boliviana y a la historia que yace detrás de la yuca y el plátano. La Torta de yuca y plátano con dulce de leche no solo es una delicia para los sentidos, sino también una ventana a la tradición y la cultura de Bolivia.
¡Que disfruten cada bocado de esta experiencia culinaria única!
TORTA DE YUCA Y PLÁTANO CON DULCE DE LECHE
Ingredientes:
Para la masa:
2 tazas de yuca cocida y hecha puré.
2 u. plátanos maduros, machacados.
3 u. huevos.
1 taza de azúcar.
2 tazas de harina
1/2 taza de mantequilla derretida.
1 cucharilla de esencia de vainilla.
1 cucharilla de polvo de hornear.
1/2 cucharadita de sal.
Para el relleno:
1 taza de dulce de leche.
1/2 taza de nueces picadas (opcional).
Preparación:
Precalentar el horno a 180°C (350°F) y engrasar un molde para pastel de aproximadamente 9 pulgadas de diámetro.
En un tazón o bowl grande, mezclar la yuca cocida y hecha puré con los plátanos machacados hasta obtener una mezcla homogénea.
Agregar los huevos uno a uno, batiendo bien después de cada adición.
Incorporar la mantequilla derretida y la esencia de vainilla. Mezclar hasta que estén completamente integrados.
En otro tazón o bowl, mezclar la harina, el polvo de hornear y la sal. Luego, añadir esta mezcla seca a la mezcla húmeda y revolver hasta que todos los ingredientes estén bien combinados.
Verter la mitad de la masa en el molde previamente engrasado.
Añadir el dulce de leche de manera uniforme sobre la masa en el molde.
Agregar las nueces picadas, si las está utilizando, sobre el dulce de leche.
Cubrir con el resto de la masa.
Hornear en el horno precalentado durante 40-45 minutos o hasta que un palillo insertado en el centro salga limpio.
Retirar la torta del horno y dejar enfriar en el molde durante unos minutos antes de desmoldarla.
Una vez que la torta se haya enfriado por completo, se puede espolvorear un poco de azúcar glas por encima o decorarla a su gusto.
Emplatado:
Porcionar y servir caliente en platos individuales, sugiero acompañar con una deliciosa taza de chocolate beniano bien caliente.
¡Y ahí lo tienen! la Torta de yuca y plátano con dulce de leche, es un postre delicioso que combina la suavidad de la yuca y la dulzura del plátano con la riqueza del dulce de leche.
¡Disfruten de esta deliciosa creación boliviana!
Queridos lectores hasta la próxima cucharada de sabiduría gastronómica y no olviden que:
“La comida hecha con amor, física, química y biológicamente sabe mejor”
Chef Franz R. Arandia Belmonte
Gastrónomo Profesional e Investigador Gastronómico
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