La ciudad de La Paz fue paralizada por segundo día consecutivo, por las movilizaciones violentas protagonizadas por los cooperativistas mineros que exigen atención del Gobierno a sus demandas, situación que generó perjuicios a las actividades que desarrollan la ciudadanía paceña. Además reprocharon el silencio de las autoridades y la pasividad de la Policía ante los destrozos causados por grupos privilegiados.
La población tuvo que caminar por largos tramos para llegar a sus destinos más si éstos estaban por el centro paceño y uno de los medios de transporte más utilizados fue las diferentes líneas de Mi Teleférico, pero las filas fueron muy extensas.
Desde el pasado lunes, cerca de 15 mil mineros instalaron 20 puntos de bloqueos en diferentes arterias de la urbe paceña, distribuyéndose en la zona Central, Norte, Sur, Sopocachi y Miraflores.
Por otro lado, el abogado Jorge Valda dijo que la aprehensión de siete mineros cooperativistas, que los últimos dos días destruyeron jardineras y ocasionaron destrozos en tres instituciones públicas de la ciudad de La Paz, contrasta con los seis años de cárcel que cumplen activistas de la Resistencia Juvenil Cochala (RJC) que presuntamente pintaron leyendas en las paredes de la Fiscalía, en la ciudad de Sucre.
Asimismo, la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) rechazó el pedido de los mineros cooperativistas auríferos de anular la resolución 6/2023 de la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM), que suspende la otorgación de derechos mineros en áreas protegidas. Además, se declaró en favor de la vida y la defensa intransigente de la Madre Tierra.
También se conoció que los cooperativistas mineros auríferos decidieron ayer en un mitin mantenerse en estado de emergencia, aunque aceptaron reunirse con el presidente Luis Arce el lunes para tratar su pliego de demandas.
Movilizaciones de mineros y políticos paralizan La Paz
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