El relator especial de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre Derechos Humanos y Medio Ambiente, David R. Boyd, se pronunció respecto al reciente pedido del sector minero aurífero de explotar áreas protegidas en propio beneficio, sin tomar en cuenta el daño que se puede provocar en estas zonas de conservación.
“Nunca debe permitirse la minería en zonas protegidas. Esto viola el derecho humano a un medio ambiente limpio, sano y sostenible”, escribió Boyd en la red social X (antes Twitter), compartiendo un pronunciamiento de la Coordinadora Nacional de Defensa de los Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas de Bolivia (Contiocap).
El relator agregó en su post que en el caso específico de Bolivia, la explotación en estas áreas naturales, “también viola los derechos de la madre naturaleza”.
Entre los pedidos de los mineros auríferos, además de la exigencia de reducciones impositivas, se encuentra la solicitud de que los Certificados de Compatibilidad Únicos (CCU’s) que les fueron entregados por el Servicio Nacional de Áreas Protegidas les sirvan como permiso para realizar operaciones mineras en parques y reservas naturales.
“Es decir que el Sernap, convertido en brazo operativo para el sector minero, otorga autorizaciones cuando es una instancia que debería, más bien, impedir el ingreso de actividades extractivas a las Áreas Protegidas”, señala el pronunciamiento de la Contiocap, compartida por el relator de la ONU.
Contiocap exige que estos certificados (CCU’s) sean revocados por ser considerados inconstitucionales.
Esta organización denuncia que el sector minero quiere aprovecharse de todas las áreas fiscales, áreas protegidas y áreas forestales para su propio beneficio y sin considerar el bien común, ya que la explotación minera en esta zona pone en riesgo el cuidado del medioambiente.
El punto 9 de su pliego petitorio, los mineros exigen la “prosecución de trámites de adecuación en áreas forestales y áreas protegidas de derechos preconstituidos”. (Agencias)