A pesar de que el informe del ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, informó que Bolivia está entre los tres países de mayor crecimiento, al segundo trimestre de 2023 y que crecerán más de lo que señalan los organismos internacionales, sin embargo, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) proyecta que el país se ubicará en cuarto lugar con 2,2%.
Según la Cepal, en su último informe económico de la región, indica que Bolivia está muy lejos de ser la tercera economía de la región en crecer en 2023. Además, el Ministro de Economía, en su balance del martes, hizo desaparecer del mapa a Venezuela, que crecerá más que nuestro país el 2023 y 2024 en cuánto a su Producto Interno Bruto (PIB).
El Banco Mundial proyectó un crecimiento para Bolivia de 1,9% y el Fondo Monetario Internacional (FMI) de 1,8% para 2023, mientras la Cepal de 2,2%, pero el Gobierno a principios de año proyectó una cifra de 4,8%, en las últimas semanas de la pasada gestión bajó el porcentaje a 3%, en tanto los economistas proyectan a lo mucho 2%.
El economista Gonzalo Chávez dijo en sus redes sociales que el crecimiento será bajo, bonsái, con una inflación reprimida en base a significativos subsidios, en especial para los hidrocarburos, que la pasada gestión habría alcanzado a 1.800 millones de dólares.
En declaraciones a la Red Uno, el economista y exdirector del Banco Central de Bolivia (BCB) Gabriel Espinoza, sostuvo que el 2023 fue muy complicado para Bolivia, no sólo por la falta de dólares, sino también por la escasez de combustibles.
Indicó que la economía no crece lo suficiente como para que los ingresos de la gente vayan a crecer y este es un primer elemento macroeconómico que se refleja en los bolsillos de la gente.
Resultados
Mientras el Banco Central de Bolivia (BCB), en su presentación de las Reservas Internacionales Netas (RIN), informó que a pesar de un contexto adverso tanto interno como externo, se alcanzaron resultados favorables como haber alcanzado una tasa de crecimiento económico de 2,21% al primer semestre de 2023, se redujo la tasa de desocupación hasta 3,6%, se mantuvo la inflación más baja de la región y el mundo con 1,6% acumulado a noviembre del año pasado, la liquidez se mantuvo en niveles adecuados, se profundizó el proceso de bolivianización ya que el 99,3% de los créditos están en moneda nacional, al igual que el 89,5% de los ahorros.
Con respecto a la desocupación, los economistas ya criticaron a las autoridades del sector económico por sus declaraciones de la baja desocupación, debido a que no mencionan el alto porcentaje de la informalidad, trabajo precario sin seguridad social y de sobrevivencia.
Espinoza aseguró que en los dos últimos años la economía se ha informalizado de mayor manera, es decir se registra una altísima ocupación, ya que todos tienen una actividad económica para generar recursos.
Los cuenta propistas, tiendas, puestos de venta en la calle, choferes, entre otros, salen muy temprano a trabajar para lograr ingresos, pero no es seguro de que sí lograrán generar dinero, reflexionó.
Datos
Mientras tanto, el presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, afirmó que los datos presentados por las autoridades no son finales del 2023, y tal vez recién se conozcan, a medianos de la presente gestión, el verdadero valor del PIB.
Si bien se informa datos al primer semestre sólo de la región sudamericana, sin Venezuela, y no se toma en cuenta que a pesar de la crisis económica de esta nación el año pasado y el subsiguiente va a crecer más que Bolivia, según el Banco Mundial y el FMI, de acuerdo a Romero.
Por ello critica las declaraciones de las autoridades de Gobierno, sin contemplar a Venezuela, y peor sin contar con datos finales del crecimiento económico, sino que sólo se lo hace a base de proyecciones.
Explica que, por ejemplo, Guyana crecerá más que Bolivia, pero eso no quiere decir que tenga un PIB mayor, además se debe ver la calidad del crecimiento.
El sector hidrocarburos decreció en los últimos años, y afectó al crecimiento de la economía nacional, pero lo cierto es que Bolivia está lejos de ocupar un tercer lugar en crecimiento, reflexionó Romero.