La ola de calor en la Antártida Oriental de marzo de 2022, con temperaturas de 30 a 40 grados por encima del promedio, fue desatada por el río atmosférico más intenso jamás observado en la región.
La ola de calor, que durante cuatro días afectó a un área del tamaño de la India (3,3 millones de km2) fue objeto de análisis de dos artículos complementarios publicados ahora en el Journal of Climate de la American Meteorological Society.
Este evento récord estableció un nuevo récord histórico de temperatura máxima de -9,4°C el 18 de marzo cerca de la Estación Concordia en la Meseta Antártica en la Antártida Oriental, con temperaturas entre 30°C y 40°C por encima del promedio. Marzo suele ser un mes de transición hacia el invierno antártico en la Estación Concordia, con temperaturas promedio diarias que alcanzan un máximo, alrededor de -40°C y -50°C.
Las temperaturas extremas fueron impulsadas por un intenso “río atmosférico”: una banda concentrada de vapor de agua atmosférico, que transporta calor y humedad desde los subtrópicos hasta las profundidades del interior de la Antártida.
Los científicos descubrieron que la convección y la actividad de los ciclones tropicales en el Océano Índico eran una fuente importante de humedad, que luego era transportada rápidamente a la Antártida gracias a una mayor ondulación en la corriente en chorro que unía las latitudes bajas y altas.
La intrusión de los ríos atmosféricos provocó una espesa capa de nubes sobre la meseta antártica oriental atrapando el calor en la atmósfera inferior. Combinadas con la radiación solar dispersa, estas condiciones finalmente dieron como resultado un intenso calentamiento de la superficie.
El Dr. Tom Bracegirdle, coautor de los artículos y líder científico adjunto del equipo de Atmósfera, Hielo y Clima del British Antártida Survey, señala en un comunicado: En todo el mundo, los fenómenos meteorológicos y de temperatura extremos están batiendo récords por amplios márgenes, este evento demuestra que la Antártida no es inmune a esta tendencia emergente. Esta escala de anomalía de temperatura se consideraría un evento que ocurre cada 100 años, pero las proyecciones climáticas actuales sugieren que los extremos pueden aumentar en frecuencia.
El fenómeno extremo provocó un derretimiento generalizado de la superficie a lo largo de las zonas costeras y exacerbó una extensión récord de hielo marino. Además, se cree que un ciclón extratropical al oeste del río atmosférico provocó el colapso final de la plataforma de hielo Conger, que ya era críticamente inestable. (Europa Press)