China se encamina a una recesión, los conflictos bélicos empujan los precios de alimentos y materias primas hacia arriba, y los países avanzados siguen encarando la inflación, Bolivia no es ajena a este contexto, por lo que requerirá medidas o cambiar de modelo, de lo contrario el abismo está cerca.
Después del comunicado de austeridad del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas, en la que instruye bajar los gastos en viáticos, transporte, impresión, llamadas, principalmente, y por ello espera un ahorro de 1.100 millones de bolivianos, los economistas aplaudieron la iniciativa, pero señalan que se requiere cambios estructurales para bajar el gasto gubernamental.
El economista Gonzalo Chávez, Fernando Romero y Gabriel Espinoza, coincidieron, por separado, que el Gobierno reconoce que hay una crisis económica y que toma medidas para reducir el gasto, aunque no es suficiente.
Mundo
Según la edición más reciente del informe Perspectivas económicas mundiales del Banco Mundial, a medida que el mundo se acerca al punto medio de lo que se esperaba que fuera una década transformadora para el desarrollo, la economía mundial está próxima a batir un lamentable récord a fines de 2024: los cinco años con el menor crecimiento del Producto Interno Bruto de las últimas tres décadas.
La entidad internacional señala que la economía mundial va camino a registrar su peor desempeño de las últimas tres décadas para un período de cinco años, pero las reformas destinadas a impulsar la inversión y fortalecer la política fiscal podrían ayudar a cambiar el rumbo.
Bolivia no será la excepción, pues el organismo internacional proyecta un crecimiento de 1,5% para la presente gestión, y repite la misma cifra para el 2025, mientras el Fondo Monetario Internacional (FMI) 1,9% y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) 2,1%, el más optimista. Entretanto, el Presupuesto General del Estado (PGE) 2024 proyecta un porcentaje de 3,71%.
El presidente del Colegio de Economistas de Tarija, Fernando Romero, señaló que el contexto interno y externo incidirá en la economía boliviana en la presente gestión, y por ello, plantea que se necesita políticas públicas en el ámbito económico para evitar que el crecimiento no sea menor.
Pero no sólo para generar ingresos fiscales, sino también empleos formales para evitar el crecimiento de la informalidad y la pobreza, complementó a tiempo de indicar que en los primeros días de la presente gestión no se ha dado tregua a la incertidumbre y a las malas noticias.
Hay grandes posibilidades que los problemas que se registraron en 2023, como la escasez de dólares, falta de combustibles y reducción de las Reservas Internacionales Netas (RIN) del Banco Central de Bolivia, se incrementen por el contexto interno y externo, alertó.
Inclusive hay la posibilidad de que se incrementen los problemas de iliquidez por el aumento salarial, que se estima que estará en 5%, y la coyuntura externa por el precio del petróleo, que podría aumentar por los conflictos bélicos. Como se recordará el Gobierno hizo su presupuesto en base a 71 dólares el barril de petróleo.
Interés
Las tasas de interés todavía son altas, por lo que los créditos serán caros, y la llegada de capitales es incierta. El dólar sigue escaso, y por consiguiente, la compra de materias primas e insumos serán más caros para las industrias bolivianas.
Las importaciones van a ser caras sobre todo de carburantes ahí está el problema, debido a que las divisas no son suficientes para regular el mercado cambiario.
China
A eso se debe sumar el caso de China, de acuerdo a medios internacionales está en serios problemas por el tema de la quiebra de empresas importantes del sector inmobiliario, así como una caída en la actividad económica.
Al respecto, Romero sostiene que si China decrece, se reducirá la demanda de materias primas y alimentos, y esto va provocar que el resto del mundo se ralentice, en especial, los más afectados serán los proveedores de recursos naturales, como Bolivia.
Para el economista Paul Krugman, la economía de China está en serios problemas. “Hay razones para creer que el país asiático está entrando en una era de estancamiento y decepción. Pero atención: su tropiezo económico puede convertirse en un problema de todos”, escribió el experto en Infobae.com.
Mientras la economía de Estados Unidos logró alivianar un poco sus expectativas en el tema del aumento de la inflación, China fue en dirección contraria, pues el 2023 registró indicadores poco alentadores, con excepción de su crecimiento que llegó a 5,2%, según informe oficial.
El titular de los economistas de Tarija señaló que el proceso inflacionario bajó su ritmo por las políticas monetarias implementadas en las economías avanzadas, como dato, en diciembre Estados Unidos cerró con una cifra de 3%.
Romero sostiene que las tasas de interés todavía son altas, aunque lograron frenar en algo la galopante en las economías desarrolladas, la situación de riesgo todavía no pasó, pues la amenaza sigue vigente.
Inflación
Mientras tanto, el Gobierno resalta el tema de la inflación baja así como el menor porcentaje de desocupados, pero los economistas indican que el control y la subvención millonaria, de 2.000 millones de dólares y el contrabando, evita el alza de los precios, y que la informalidad absorbió a los desempleados, que trabajan en condiciones precarias.
En América Latina, los 4 países que registraron una cifra menor en inflación en 2023, son: El Salvador 1,23%, Ecuador 1,35%, Panamá 2,01% y Bolivia 2,12%.
Los economistas vienen reiterando a las autoridades económicas del Gobierno a sincerar los precios y bajar el riesgo de una inflación reprimida, pues muchos artículos de la canasta familiar subieron, aunque algunos bajaron, pero el poder adquisitivo del boliviano se redujo.
La austeridad es un paso importante, que tiene como meta un ahorro de 1.100 millones de bolivianos, que no representa ni siquiera el 1%, para ser más preciso sólo es el 0,41% del Presupuesto General 2024, informó Romero.
Propuestas
Chávez, en sus redes sociales, planteó una serie de medidas para que el Gobierno pueda obtener recursos, como el cobro de impuestos a cocaleros, cooperativistas y grandes gremialistas, y reducir para los formales.
También cerrar empresas públicas y reducir el Estado, y en el caso de los combustibles analizar la subvención, así como paralizar el proceso de industrialización que lleva el Gobierno, debido a la falta de recursos.
Informe
Conforme a un posible criterio, la economía mundial está en mejor situación que hace un año: el riesgo de una recesión mundial ha disminuido, en gran parte debido a la fortaleza de la economía de Estados Unidos. Pero, las crecientes tensiones geopolíticas podrían crear nuevos peligros a corto plazo para la economía mundial, señala el informe del Banco Mundial, presentado hace semanas atrás.
Al mismo tiempo, las perspectivas a mediano plazo de muchas economías en desarrollo se han ensombrecido en medio de la desaceleración del crecimiento en la mayoría de las principales economías, la lentitud del comercio mundial y las condiciones financieras más restrictivas de las últimas décadas, agrega el informe.
Se prevé que en 2024, el crecimiento del comercio mundial será solo la mitad del promedio registrado en la década anterior a la pandemia. Asimismo, es probable que los costos de endeudamiento para las economías en desarrollo —sobre todo las que tienen malas calificaciones crediticias— sigan siendo elevados, puesto que las tasas de interés mundiales se estancaron en niveles máximos de cuatro décadas en términos ajustados por inflación, resaltó.
