Parte II
4) La mayoría de los funcionarios públicos en Santa Cruz, son traídos desde las alturas andinas, lo cual es un reclamo constante de los colegios profesionales cruceños, mostrando con ello un trato discriminatorio y colonial, contra los oriundos de esta tierra. La presencia de cruceños en el gobierno central y otras dependencias del Estado, ha sido históricamente entre escasa y nula.
5) El avasallamiento de nuestras áreas protegidas y predios privados productivos, ha sido una constante, especialmente en este último tiempo que gobierna el MAS, con sus dizque interculturales. El ataque armado contra periodistas, en el predio Las Londras, es uno de los casos más emblemáticos. La siembra de coca para en narcotráfico y las fábricas de cocaína en áreas protegidas, un tema común. Cabe destacar que la coca es ajena a la cultura Camba.
6) La marginación de la rica historia cruceña en los colegios, universidades y en los actos de Estado, es otro rasgo clarísimo de genocidio cultural contra esta tierra fraterna, que acoge en su seno a gente venidas de todas partes de la república, en busca de su tierra prometida. La machacona imposición de la Wiphala, representativa del MAS y de la cultura andina, corrobora nuestra afirmación.
7) Las trabas continuas al sector productivo cruceño, es otra de las muestras de lo afirmado. Sector productivo que garantiza la soberanía alimentaria de Bolivia, la generación de empleo, el pago de impuestos y la recepción de divisas vía exportación. Se ha llegado al extremo de prohibir sus exportaciones, por el afán de destruirlos.
8) El secuestro de nuestro gobernador, Luis Fernando Camacho Vaca, elegido por voto popular con el 55,64% de la población cruceña, esgrimiendo el falaz pretexto del golpe de Estado 2019, priva a Santa Cruz de su principal figura política, dificultando nuestro progreso y bienestar.
9) Pero el epitome de este genocidio étnico cultural contra Santa Cruz, es la pretendida construcción de la carretera Porongo-Buena Vista, que dañará el acuífero Güendá- Urubó y el Parque Amboró, poniendo en peligro el suministro de agua potable, para el área metropolitana de Santa Cruz y la vida de sus 3 millones de habitantes.
Como ciudadano de esta tierra, pido a nuestras autoridades y líderes regionales, denunciar este genocidio ante la comunidad internacional, especialmente al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, a tiempo de pedir que se envíe un relator especial, para que verifique la denuncia. Todo esto sin perjuicio de que Santa Cruz tome también las medidas que sean necesarias para impedir este genocidio, en uso de nuestra legítima defensa.
jimiortizsaucedo@gmail.com