Es común escuchar el comentario “Después del Carnaval empieza el año…” y parecería que es así, ya que después de esta particular época ocurren las cosas “serias”. Una de ellas se constituye en un dolor de cabeza para muchos jóvenes y sus familias: la consabida redacción de la tesis de grado o, en su defecto, el proyecto de grado. Estrés, ansiedad, inseguridad e insolvencia académica son sólo algunos elementos que suelen acompañar el proceso de escribir, perfeccionar, aprobar y, finalmente, defender la tesis frente a un tribunal. La angustia del o la tesista se irradia a las familias: padres, hermanos e incluso enamorados y enamoradas, esposos y esposas, se ven involucrados en esta tarea.
Puntualicemos en tres errores frecuentes que los jóvenes cometen, los cuales deberían ser resueltos incluso antes de plantear el tema de la investigación. Un primer elemento es la debilidad en la metodología de investigación. Sea la carrera que fuere, las materias de metodología son poco aprovechadas y menos aún se realizan prácticas que entrenen a los estudiantes en el uso de las técnicas e instrumentos de investigación inherentes a su área profesional. No siempre se comprende el método científico como un conjunto de pasos que se deben seguir para llegar a hallazgos que posibiliten conocer algo que antes no se conocía sobre el tema propuesto.
Un segundo elemento, son los formatos. Muchos son los jóvenes que desconocen o no logran acceder fácilmente tanto al formato del perfil de tesis o perfil de proyecto de grado, que viene a ser la etapa inicial del trabajo y que además deberá ser aprobada por cierta instancia, como el formato de la tesis o proyecto, propiamente dichos. Una vez que tienen estos formatos en sus manos suele ocurrir que, incluso cuando contemplen una explicación de cada punto, no sean cabalmente comprendidos debido a que, durante sus carreras no los estudiaron. Por tanto, ya habiendo egresado, el estudiante debe aprender, por su cuenta, cada punto del formato que obedece a la aplicación del método científico. Una vez aprendido, recién lo podrá aplicar al trabajo de tesis o proyecto.
El tercer elemento es el modelo. Para desarrollar un trabajo de tesis o proyecto de grado es necesario contar con trabajos ya aprobados, para tomarlos como modelos de lo que se pretende redactar. Suele ocurrir que no siempre se logra acceder a esta información o no hallan un modelo suficientemente parecido en cuanto al tema, la metodología u otro detalle que ayude a desarrollar el propio trabajo.
El tiempo estimado para desarrollar un trabajo de investigación es variable, sin embargo, es prudente que no se pretenda sobrepasar un periodo de 10 meses, para lo cual el diseño de investigación y el cronograma de actividades deberá establecer alrededor de 6 a 8 meses, puesto que el resto será empleado en revisiones y correcciones. No es aconsejable, por tanto, esperar a que pase el Carnaval para iniciar este proceso, así que… ¡manos a la obra!
La autora es antropóloga.