Mujer radialista propone usar las redes frente al cierre de emisoras

La coordinadora de la Red Aymara de Erbol, Graciela Dorado, alentó a los reporteros populares de la región de los Yungas a desplegar su talento periodístico a través de las redes sociales.
Tras la revocatoria de la licencia de radio FM Bolivia de Chulumani, en la provincia Sud Yungas de La Paz, la experimentada periodista explicó que hay muchas vías alternativas.
“El camino es amplio, hay que seguir y no hay que rendirse”, dijo en una entrevista a través de la página de Facebook de FM Bolivia.
El pasado 6 de marzo, la gubernamental Autoridad de Fiscalización de Telecomunicaciones (ATT) revocó la licencia de FM Bolivia que informaba a sus oyentes desde el año 2014, a través de la banda de frecuencia modulada.
La entidad estatal argumenta que, el medio privado e independiente cometió reiteradas infracciones a las normas de la ATT.
“Al cerrarse los micrófonos se cierra la voz de las personas que no podrán decir lo que piensan”, comentó Dorado quien es la periodista y locutora en aymara del programa radial que emite la red Erbol, entre las 6 y las 7 de la mañana.
Habló a los reporteros populares a los que pidió continuar su trabajo a través de nuevas plataformas tecnológicas, y los llamó a unirse en la búsqueda de nuevos caminos comunicacionales. “Hay que enfocarse en ellos y hay que persistir”, expresó.
“Estamos para apoyarlos cuando necesiten”. Como corresponsales, sea de noche o a la luz del sol, no deben declinar en su trabajo, resumió Dorado.
Además de FM Bolivia, Radio Yungas de la Red Erbol calló sus emisiones al suspender trámites de renovación de licencia, en enero de 2023, según datos de la Unidad de Monitoreo de la Asociación Nacional de la Prensa (ANP).
El pasado año, Radio Activa, de propiedad de los vecinos de la localidad la Calzada, en el municipio de La Asunta, Sud Yungas, sufrió el decomiso de sus equipos porque no contaba con una autorización de funcionamiento.
En el municipio de La Asunta (Sud Yungas), Radio Alternativa, fue sancionada con 30.000 bolivianos, unos 4.300 dólares, por incumplimiento de requisitos técnicos.