Alivio para los choferes de las más de 500 cisternas que están paradas en Paraguay. Según el reporte de los propios afectados, ya tienen autorización para cargar diésel que está destinado al mercado interno boliviano.
La luz verde para cargar combustible la obtuvieron ayer, después de cerca de 25 días de estar varados sin tener una respuesta o una autorización para retornar a Bolivia con la respectiva carga de importación.
El reporte refleja que serán despachadas 60 cisternas de las más de 500 que se encontraban paradas a 25 kilómetros de la capital paraguaya, en un escenario en el que los choferes denunciaron que estaban en un espacio que no reúne las condiciones sanitarias, a lo que deben sumar los gastos diarios por estar parqueados y por obtener alimentos.
Previo a la autorización, los afectados sostuvieron que estaban a la espera que Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) diera la autorización para poder cargar los carburantes, asegurando que los mismos están destinados a la petrolera estatal.
“El diésel es para Yacimientos, para el Estado Boliviano. Esperamos que YPFB dé la autorización”, manifestó uno de los transportistas afectados, al confirmar que la carga es combustible que importa Bolivia abastecer al mercado interno.
De esta manera vuelve el alivio a los conductores que se encontraban en vilo debido a la falta de recursos para sobrevivir fuera de sus hogares y en otro país.
En este lapso, además de la falta de dinero para alimentación y servicios básicos, los afectados denunciaron la muerte de cuatro de sus colegas, en un contexto de estrés y calor extremo que implican la situación en el país vecino.
COBROS
Camioneros bolivianos sufren una odisea para intentar cargar combustible en Paraguay y retornar al país. Testimonios señalan que, además de padecer el calor, deben esperar en condiciones precarias de pocos servicios básicos, además de que tienen pocos recursos económicos y son víctimas de cobros arbitrarios y hasta corruptos.
“Ya llevamos como 24 días”, lamentó en entrevista con Erbol uno de los camioneros que pidió guardar en reserva su identidad.
Explicó que los camiones esperan las cargas de combustible y que la única explicación que les dan es que no ha llegado la orden de liberación desde Bolivia.
Dijo que esperan en un garaje con condiciones precarias y servicios sanitarios insuficientes. Además de que son pasibles de robo, como en su caso que le sustrajeron cajas de herramientas y conservadoras.
Según otro testimonio, los conductores esperan es un predio donde sólo tienen cinco baños, cinco duchas, para el personal de más de 400 camiones.
En entrevista con la periodista Mercedes Fernández, el camionero indicó que existe un presunto favoritismo, porque se ha observado camiones que ingresan directamente a la planta mientras otros esperan.
Respecto a los cobros, el camionero explicó que la tarifa para el estacionamiento es de 20 mil guaraníes (20 bolivianos), pero los encargados les cobran más, hasta 50 mil guaraníes, en caso de que haya aglomeración.
Lamentó también que haya corrupción. Por ejemplo, mencionó que para lograr cargar el combustible de manera apresurada se cobra montos mayores de 100 mil guaraníes, llegando a monos de 150 mil o 200 mil.
Otra queja es por los controles abusivos de la autoridad caminera paraguaya. El camionero relató que cuando llevan coca, los policías la decomisan o les piden dinero. “Cuando quieren plata te buscan hasta por qué estás fumando dentro del camión”, agregó.
En cuanto a la comida, señaló que los alimentos son caros allá, por lo cual los choferes bolivianos se reúnen en grupos para cocinar. Dijo que en un comienzo podían comer pollo con arroz, pero al pasar al tiempo y por la falta de dinero llegan a comer sólo huevo con papa.
Los camioneros denunciaron que cuatro de sus compañeros fallecieron en medio de este contexto.
El primer conductor entrevistado contó que uno de sus compañeros, ahora fallecido, estaba fatigado y padecía de estrés. Lo llevaron a un hospital y falleció.
Precisó que dos de los fallecidos estaban el predio de espera, mientras que otros dos en la Ruta desde Paraguay a Santa Cruz.
(Con datos de Unitel/Erbol)
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