Los parámetros utilizados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) no reflejan el verdadero nivel de inflación en Bolivia, por lo que su eficacia es cuestionable; los precios de los bienes y servicios alcanzan el 3,6% y la tendencia es ascendente, debido al incremento en el precio del dólar que seguirá encareciendo las importaciones, indicó el economista Gabriel Espinosa.
Según el economista, haciendo una lectura de marzo del 2023 a marzo del 2024, el índice de inflación es de 3,06%, el más alto comparado con la post pandemia y no así el 0,74% como lo asegura el INE.
“El panorama es que los precios continúen subiendo por la falta del dólar y falta de disponibilidad de las divisas para importar, actualmente los importadores están con el dólar en 8,30 y eso significa que eventualmente van a transferir ese incremento a sus costos”, afirmó, el economista.
Tomando en cuenta, solo la canasta familiar, Espinoza asegura que la inflación a marzo del 2024 es de 4,9. “Si miro el IPC, con los datos que tiene el gobierno, la inflación de marzo 2023, contra marzo de 2024, es del 4,5%, la más alta en cuatro años”, manifestó el economista.
Espinoza, afirma que el 24% de los productos de la canasta familiar, en Trinidad, no han tenido cambios en 24 meses. “Eso es llamativo o preocupante, porque significa que existe un error muy grande en los mecanismos de medición del INE, porque es poco creíble que un cuarto de los precios que se miden durante los dos últimos años no haya variado en una región que está muy lejos y que enfrenta mucha volatilidad”, puntualizó el economista.
Otro aspecto que señaló Espinoza, es que el gobierno siempre evalúa la estabilidad económica a través de datos macroeconómicos, siendo esto un error, porque son los datos microeconómicos, los que afectan al bolsillo del ciudadano que cada vez, ve incrementado sus gastos.
Entretanto, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el primer trimestre del presente año, Bolivia registró una inflación del 0,74% y es el país que mantiene una de las tasas más bajas de la región.
El ministro de Planificación del Desarrollo, Sergio Cusicanqui, explicó que en marzo, en el país, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación del 0,46% y en el primer trimestre se tuvo una inflación acumulada del 0,74%.
La variación del 0,46% en marzo se explica porque productos como el tomate y la cebolla, principalmente, tuvieron una variación positiva del 22,09% y 16,93%, respectivamente, debido a que los eventos climáticos afectaron la producción de estos dos alimentos en febrero y parte de marzo.