Un equipo de investigadores ha desarrollado una madera transparente con tres capas ignífugas que podría ser utilizada para fabricar células solares de perovskita más eficientes. Este avance representa una innovación en el sector de la construcción, donde la madera y el vidrio son materiales ampliamente utilizados en España.
La idea de utilizar madera para crear vidrio transparente no es nueva, habiendo sido explorada por Siegfried Fink en 1992 al blanquear los pigmentos de las células vegetales. Investigaciones posteriores han logrado crear materiales fuertes y resistentes a partir de la madera, incluyendo los avances recientes de un equipo de la Universidad Central del Sur de Silvicultura y Tecnología (CSUFT) en China.
Los resultados de esta investigación, publicados en la revista Research, sugieren que la madera transparente no solo puede reemplazar elementos como las ventanas, sino que también puede servir como sustrato para células solares de perovskita. Estas células tienen el potencial de superar a las placas solares convencionales de silicio en términos de eficiencia energética, con mejoras de más del 15% gracias a la alta transmitancia luminosa de la madera transparente.
Para lograr la transparencia en la madera, se emplea una técnica compleja que implica la modificación o eliminación de la lignina, una sustancia natural que da color marrón a la madera. Posteriormente, se rellenan las células huecas con una sustancia como la resina epoxi para desviar la luz de manera similar a las paredes celulares, logrando así la transparencia.
Ante los desafíos que enfrenta la madera transparente, como la escasez mundial de madera y su vulnerabilidad al fuego debido al uso de polímeros en su fabricación, los investigadores identificaron al bambú como una alternativa prometedora. El bambú, con su rápida tasa de crecimiento y regeneración, se presenta como una opción sostenible y eficiente para la producción de placas de vidrio a partir de madera transparente.
La composición química y estructura interna del bambú son similares a las de la madera, lo que le confiere propiedades únicas como resistencia, porosidad y permeabilidad. Con una producción cuatro veces mayor que la madera por acre, el bambú se destaca por su excepcional eficiencia y su potencial para revolucionar la industria de la construcción.