La inflación acumulada a mayo 2024 fue de 1,95%, cifra 3,4 veces superior a la de mayo de 2023. Este dato, ya representa el 92% de toda la inflación acumulada la gestión pasada. Además, con el actual IPC de mayo, ya se alcanzó alrededor del 50% de la meta de inflación planteada por el Gobierno para la presente gestión, de 3,6%.
A pesar de que el tomate fue uno de los productos que más subió de precio en mayo, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) su variación positiva fue apenas del 7,29%, inferior que del locoto (32,58%) y de la arveja verde (13,25%), señaló el presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero.
El gobierno atribuye este proceso inflacionario importante al efecto climatológico, la inflación importada y el contrabando a la inversa. De cierta manera es cierto, sobre todo en productos agrícolas por sequías, inundaciones o heladas. Los dos otros factores tienen relativa relevancia, agregó.
«Se obvia la principal causa de esta variación acelerada y positiva de precios a mayo 2024, la escasez de dólares y un tipo de cambio paralelo caro, que encarece la importación, producción y comercialización de productos», aseguró.
El economista Gonzalo Chávez a través de sus redes sociales explicó que el valor del producto importado en su país de origen no subió, lo que se incrementó el valor del artículo fue el dólar caro en el mercado paralelo nacional.
En ese contexto, también el contrabando es más caro, el tipo de cambio del dólar paralelo es elevado y las subvenciones ya no tienen un pleno efecto positivo para mantener baja la inflación en el país.
En resumen, los productos agrícolas, más allá de la especulación, tenderán a bajar de precio, pero no sabemos a ciencia cierta sí en los niveles «normales». Lo cierto, es que en este 2024 la tendencia es que los precios suban, exista una latente presión inflacionaria, sobre todo por la escasez de dólares y su precio informal elevado, lo cual además de afectar negativamente al funcionamiento de nuestra economía, sin dudas, está reduciendo a paso seguro el poder adquisitivo de nuestra moneda nacional, cada vez más devaluada, concluyó Romero.