Dr. José Alberto González Ramírez – Cirujano General y Oncólogo
La detección oportuna salva vidas
Es el tipo de cáncer más frecuente y la causa más común de muerte por cáncer en mujeres a nivel mundial. Esta enfermedad se desarrolla en las células mamarias y progresa por etapas.
Los síntomas del cáncer de mama incluyen:
- Un bulto o masa en el seno que se siente diferente al tejido circundante.
- Cambio en la forma, el tamaño o la apariencia de la mama.
- Erupción mamaria, dolor en los senos y pezón invertido.
- Cambios en la piel sobre la mama (hoyuelos).
- Piel descamada sobre el seno, particularmente el área oscura alrededor del pezón.
- Enrojecimiento y/o picaduras de la piel de la mama que se asemeja a la piel de naranja.
- Secreción del pezón.
El cáncer de mama puede originarse en diferentes partes del seno. La mayoría de los casos comienzan en los conductos que llevan la leche hacia el pezón (cánceres ductales), otros se originan en las glándulas que producen leche (cánceres lobulillares). También hay otros tipos de cáncer de mama que son menos comunes como el tumor filodes y el angiosarcoma.
A veces el cáncer de mama es detectado después de que surgen síntomas, pero muchas mujeres no llegan a manifestarlos. Es por este motivo que hacer las pruebas de detección periódicas es tan importante.
El diagnóstico del cáncer de mama incluye un examen físico, análisis de sangre y algunas pruebas de diagnóstico por imágenes. Un resultado con certeza requiere el examen microscópico de una muestra del tejido mamario sospechoso (biopsia). La biopsia, sin embargo, es tan solo el último escalón en una cadena de procedimientos.
El pronóstico después de un diagnóstico de cáncer de mama ha mejorado tras la introducción de programas de detección temprana y protocolos de tratamiento estandarizados. Acude con tu especialista periódicamente.