El Presupuesto General del Estado (PGE) 2023 proyectó un déficit fiscal de 7,5%, pero al parecer la cifra pasó el 10%, de acuerdo a la declaración del ministro de Economía y Finanzas Públicas, Marcelo Montenegro, quien dijo que la misma estará en menos del 11%.
A la pregunta de medios de comunicación sobre con cuánto de déficit cerró el 2023, ya que el economista Gonzalo Chávez estima que fue con 12%, la autoridad dijo que estaría por debajo del 11%.
El 2002 la economía boliviana cerró con un déficit de 12,7%, mientras que en 2021 la cifra bajó a 9,3% y en 2022 siguió la tendencia a la baja, y alcanzó a 7,2%.
El presidente del Colegio Departamental de Economistas de Tarija, Fernando Romero, dijo que su modelo económico se basa en gastar solamente, y por ello hecho mano de las Reservas Internacionales.
“su modelo está fundamentado en gasto, que ha sido extraordinario; la base de su modelo económico keinesiano si no tendría recurso para gastar no funcionaria. (El Gobierno) consumió las Reservas, las divisas, el oro, de la gestora, al parecer no tiene límites su gasto”, lamentó Romero.
Mientras tanto, Montenegro asegura que se mantiene la estabilidad de precios y de la economía, por las medidas asumidas, sin embargo, los economistas señalan que en los datos estadísticos la situación está bien, pero en la realidad, es más complicado.
“La situación que vivimos es de estabilidad de precios, crecimiento de la economía, reducción de la desigualdad, disminución de la pobreza y estabilidad de precios, con una acción decidida del Gobierno Nacional a ir controlando ciertos precios que a veces, por efectos especulativos o porque en las regiones están más caros, incrementan”, aseguró.
Finalmente, el analista financiero Jaime Dunn indicó que la economía nacional ingresó nuevamente en una desaceleración; mientras Romero señala que es posible que se ingreses a una estanflación.