El ministro de Defensa, Edmundo Novillo Aguilar, en acto reservado tomó juramento al nuevo viceministro de Lucha Contra el Contrabando, Luis Amilcar Velásquez Burgoa, quien asume la tarea de ejecutar políticas y estrategias en la lucha contra el contrabando en el país.
El Ministro reconoció el esfuerzo y el empeño efectuado por el Viceministro saliente, Daniel Pedro Vargas Carrasco, en todas las tareas y gestiones que le correspondió desempeñar.
«La lucha contra el contrabando es un trabajo muy duro, altamente riesgoso para nuestras Fuerzas Armadas, sumamente importante y determinante para la economía boliviana» indicó el Ministro a tiempo de desear éxito a la nueva autoridad y exhortar a dar cumplimiento a la Constitución Política del Estado, sus leyes y todas las normativas correspondientes a su competencia.
El sector privado en reiteradas oportunidades planteó algunas medidas para efectivizar la lucha contra el comercio ilícito, pero a la fecha no fueron escuchados, ni tampoco se activó el Consejo Nacional de Lucha contra el Contrabando, a pesar de que forma parte del acuerdo suscrito con el sector privado y el Gobierno en febrero pasado.
Los datos presentados por la industria nacional señalan que el movimiento económico del contrabando alcanza anualmente a 3.500 millones de dólares; mientras los decomisos logrados por la Aduana Nacional, apenas pasa los 100 millones.
La industria alerta que el contrabando pone en riesgo más de 600 mil fuentes de trabajo, así como a las industrias, pero también el Gobierno pierde alrededor de 600 millones de dólares en impuestos.