Miles de personas se movilizaron ayer en Venezuela, en medio de las amenazas y la persecución de la dictadura tras la ratificación por parte del Consejo Nacional Electoral (CNE) del fraude electoral que dio como ganador a Nicolás Maduro, mientras un creciente número de países reconoció a su rival opositor como el mandatario electo.
Tanto Maduro como la oposición, liderada por María Corina Machado y su candidato presidencial Edmundo González Urrutia, convocaron a sus seguidores a manifestarse en respuesta a la votación del domingo.
“Estamos viviendo las horas más importantes. Todos sabíamos que este era un proceso complejo. Muchas veces nos dijeron que era imposible demostrar el fraude y nosotros lo hicimos con la victoria”, sostuvo Machado ante sus seguidores, antes de ratificar su confianza “en este Bravo Pueblo”. “Hicimos historia, esto se acabó”, insistió.
Asimismo, remarcó a sus simpatizantes que “la nuestra es una lucha cívica y pacífica, no caemos en provocaciones”. “La violencia es el único recurso que les queda (al régimen), pero nosotros no agredimos… lo nuestro es tratar a los ciudadanos con lealtad”, agregó.
EMPAPELADO
Los manifestantes venezolanos empapelaron las calles de Caracas con copias de las actas electorales para demostrar el triunfo de Edmundo González; mientras el régimen se niega a presentar los documentos que ratifican su supuesta victoria, la disidencia sigue saliendo a protestar y defender su voluntad, expresada en las urnas el pasado 28 de julio.
La oposición en Venezuela se mantiene firme en las calles, reclamando contra el fraude electoral de Nicolás Maduro del pasado 28 de julio y haciendo frente a las agresiones y la violencia de sus fuerzas de seguridad, que cada día detienen y agreden a decenas de personas injustamente. En este contexto, en las últimas horas un grupo de vecinos de Caracas recurrieron a una nueva técnica para alzar su voz y presionar a la dictadura para que presente los documentos que respaldan su supuesta victoria.
Imágenes difundidas en redes sociales mostraron a unas mujeres empapelando paredes de la capital con copias de las actas del pasado domingo, que María Corina Machado y Edmundo González Urrutia se encargaron de recopilar, verificar y cargar en un link, donde quedó expuesta la victoria de éste con más del 70% de los votos.
Contrario a lo que establece la ley venezolana, el régimen –especialmente el chavista del Consejo Nacional Electoral– aún no ha difundido estas actas, tan reclamadas tanto por el pueblo como por la comunidad internacional. En su lugar, Maduro pidió la víspera al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) que investigue y analice toda la información surgida de las urnas y ratifique el resultado de los comicios, en un intento por dar transparencia al evento, plagado de sabotajes e interferencias.
Para ello, citó a todos los candidatos a la sede del Legislativo, donde se suscribió un acta garant izando la aceptación del informe que dicho organismo presente, en un lapso aún no indicado. Sin embargo, González Urrutia se ausentó por estar en desacuerdo con las maniobras del régimen, mientras Enrique Márquez asistió pero no firmó al texto por carecer de “transparencia”.
“Espero que el CNE no se esconda bajo las togas de los magistrados (…) ¡exijo que presenten las pruebas!”, cerró.
Inclusive, el asesor jurídico de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) advirtió que se trata de “un procedimiento que (…) no existe en nuestro ordenamiento jurídico procesal”. “Lo que inventó la Sala Electoral, con todo respeto, no existe. Reto a cualquiera a que busque en la ley a ver si existe algún procedimiento de certificación en sede judicial y autenticación de resultados electorales”, apuntó Perkins Rocha.
A pesar de estas denuncias, sin embargo, la víspera el Consejo Nacional Electoral brindó un boletín actualizado, en el que presentó cifras más precisas que las de hace casi una semana atrás e insistió en la victoria del chavismo. Según su presidente, Elvis Amoroso, ya con el 96,87% de las mesas escrutadas, Maduro obtuvo el 51,95% –es decir, 6.408.844 votos– frente al 43,18% de la oposición –es decir, 5.326.104 papeletas–.
Asimismo, el funcionario oficialista se defendió de las denuncias por los retrasos en la difusión de la información y aseguró que responde a “ataques informáticos masivos” que sufrió su plataforma, provenientes “desde distintas partes del mundo” y ordenados por la Plataforma Unitaria Democrática.
CONCENTRACIÓN CONTRA FRAUDE DE MADURO
Miles de venezolanos residentes en la capital de España se han reunido en la Puerta del Sol para exigir al Gobierno de su país que reconozca su derrota en las elecciones.
Siguiendo una convocatoria que se ha extendido este sábado por las calles de Venezuela, y también por los países donde hay amplia presencia de exiliados procedentes de la nación sudamericana, miles de venezolanos se han concentrado en la Puerta del Sol, en Madrid, para protestar contra el fraude electoral del régimen de Nicolás Maduro, que el pasado domingo salió “reelegido” presidente y que se niega a publicar las actas de las votaciones.
Ahora, los venezolanos residentes en España han querido colocar a Madrid como uno de los focos de la protesta global. En la capital española, han elevado su voz este sábado para exigir que se reconozca la victoria de González como el nuevo presidente electo y que se publiquen las actas al completo.
Mientras en la propia Venezuela, muchos de los que protestan son reprimidos por el régimen, en España los manifestantes tampoco se consideran completamente a salvo. Así era el caso de una joven presente en Sol, que prefiere mantener el anonimato y dice llamarse +6. La venezolana argumenta “tener mucho miedo por su familia en Venezuela ante la extrema persecución hacia los opositores”, y explica que se encuentra en España porque “estaba siendo perseguida allá (en Venezuela)”. La joven cuenta a Infobae España la historia de un amigo, condenado a 30 años por “terrorismo”, únicamente por ejercer su derecho a manifestarse. “Esto es impensable que ocurra aquí en España”, decía emocionada para terminar la conversación. (Infobae)