El bloqueo en San Julián, liderado por productores de los municipios cruceños de Cuatro Cañadas y San Julián, alcanzó su octavo día y dejó alrededor de 2.800 camiones varados.
Los manifestantes esperaban ayer la llegada de cinco ministros del gobierno para tratar sus demandas, entre las que destaca el uso de biotecnología en la agricultura. Sin embargo, la comitiva ministerial no llegó a la zona, lo que aumentó la frustración entre los comunarios.
El dirigente, Gualberto Ortíz, señaló que a pesar de la disposición al diálogo por parte de los manifestantes, las autoridades no han mostrado interés en atender sus propuestas.
La ausencia de los ministros a la reunión programada en Cuatro Cañadas fue interpretada como una falta de voluntad para negociar, dejando la posibilidad de que los bloqueos se prolonguen durante las fiestas patrias.
Los bloqueos se concentran en tres zonas: San Julián, Cuatro Cañadas y Los Troncos. Los sectores movilizados exigen la aprobación de una ley que permita el uso de semillas genéticamente mejoradas, con el objetivo de aumentar la producción agrícola. Además, presentaron un pliego petitorio de ocho demandas, que incluye el diferimiento de créditos, acceso al programa SI-Bolivia, la construcción de carreteras y la liberación de la importación de agroquímicos.
A pesar de que el domingo se permitió el paso de camiones y buses varados durante dos cuartos intermedios, el bloqueo sigue de manera indefinida.
La situación generó un fuerte impacto en el sector transporte, que convocado a una reunión de emergencia para buscar una solución. Bismark Daza, dirigente de la federación de transporte 16 de Noviembre, pidió a las autoridades nacionales que intervengan para resolver el conflicto, señalando que el bloqueo está afectando gravemente la economía local. “Nosotros tenemos más de 2.800 camiones varados. Pedimos a los ministros dar una solución”, demandó.
Por su parte, el presidente de los empresarios privados de Santa Cruz, Óscar Mario Justiniano, advirtió sobre las consecuencias negativas de los bloqueos para la economía del país. Afirmó que, aunque las demandas de los sectores movilizados puedan ser justas y necesarias, el corte de la circulación es un factor que agrava la crisis económica y afecta a toda la sociedad boliviana. (Santa Cruz, Brújula Digital)