A junio de 2024 se observa un superávit de 155 millones de dólares en la balanza comercial, brindando mejores expectativas en torno al desempeño de este sector y, por consiguiente, una potencial mayor disponibilidad de divisas en la economía. Sin embargo, ya los economistas se anticiparon en indicar que la escasez de la divisa estadounidense provoca una menor importación de productos, así como su encarecimiento.
A pesar de un contexto internacional desfavorable, efectos climatológicos adversos y conflictos sociales, se observa, por tercera vez en esta gestión, una tendencia a la recuperación en el saldo de la balanza comercial, según el boletín del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Ese desempeño positivo se explica principalmente, por la recuperación de las exportaciones no tradicionales, que aumentaron en un 9% con relación al mes anterior. Destacándose el desempeño de los derivados de soya que aumentaron su valor exportado en 1,2 millones de dólares. Por el lado de las exportaciones tradicionales, se observa un importante incremento en las ventas externas del mineral de plata.
De acuerdo a los datos presentados por el INE, se observa que las exportaciones cayeron en junio respecto a mayo. A cinco meses las ventas alcanzaron un valor de 565,1 millones de dólares y a seis meses bajó a 552,8 millones.
Similar situación registró las importaciones. En mayo las compras alcanzaron a 776,1 millones de dólares y en junio la cifra cayó a 669,6 millones, y respecto a similar periodo del 2023, la cifra es más negativa.
Por su parte, el INE sostiene que es importante destacar también el buen desempeño del sector cárnico, que posiciona a Bolivia como unos de los principales exportadores a escala mundial. En las exportaciones tradicionales, el sector minero muestra un repunte significativo, con un incremento de mineral de plata y plomo.
