En el mundo de las finanzas, es vital que las instituciones se comuniquen de forma eficiente y segura. Por ello surgió ISO 20022, que es un conjunto de normas y reglas que se utiliza para estandarizar las transacciones financieras en todo el mundo, una especie de lenguaje global, que permite facilitar el intercambio de datos entre bancos y entre bancos y empresas. Una de sus características es que se adapta a las nuevas tecnologías, brindando transacciones más rápidas, seguras y confiables. La norma ISO 20022 se desarrolló en 2004 por iniciativa de la Organización Internacional de Normalización (ISO), SWIFT (Sociedad para las Telecomunicaciones Financieras Interbancarias Mundiales) y los bancos.
ISO (Internacional Organization for Standardization) es la Organización Internacional de Normalización sin fines de lucro, cuya principal actividad es la elaboración de normas técnicas internacionales. Las normas ISO contribuyen a que el desarrollo, la producción y el suministro de bienes y servicios sean más eficaces, seguros y transparentes. Gracias a estas normas, los intercambios comerciales entre países son más fáciles y justos. Proporcionan a los gobiernos un fundamento técnico para la legislación en materia de salud, seguridad y medio ambiente. También contribuyen a la transferencia de tecnología a los países en vías de desarrollo, sirven para proteger a los consumidores y usuarios en general, ante cualquier problema surgido de un producto o servicio.
Las normas ISO más comunes son las siguientes: ISO 13485 relativo a los dispositivos médicos, ISO 14001 relativa a los sistemas de gestión ambiental y, como mencionamos al empezar este artículo, la ISO 20022 se refiere a transacciones financieras. La ISO 20022 está basada en mensajes XML (eXtensible Markup Language) que se utiliza para el intercambio de datos financieros (pagos, adeudos, etc.) entre empresas y bancos, y también entre entidades financieras.
Estas normas no son obligatorias, a menos que sean requeridas por ciertos sectores o países, de hecho, su adopción es voluntaria. La adopción de esta norma ha sido ampliamente aceptada en Europa, especialmente en el marco de la zona única de pagos en euros (SEPA). Sin embargo, su implementación se está extendiendo a nivel mundial, con países como Australia, Canadá y Estados Unidos. La adopción de la Norma ISO 20022 en América Latina ha sido un proceso gradual. En países como México, Brasil y Chile, se ha avanzado significativamente en la implementación de la Norma ISO 20022.
Ahora bien, ¿qué tiene que ver el estándar ISO 20022 con las criptomonedas? Entremos en contexto, hace algunos días el gobierno de nuestro país aprobó su aplicación y su uso, esto como una forma de mitigar la falta de dólares en el país, pero no muchos están familiarizados o informados sobre cómo funcionan las monedas digitales, su fluctuación, la manera de adquirirlas y si en realidad son seguras, por lo que existen muchas dudas. Entremos en el tema que relaciona el estándar ISO 20022 y las criptos. Las criptomonedas, como hemos mencionado, pueden aprovechar el estándar ISO 20022 para integrarse en las finanzas tradicionales.
Recordemos que este estándar proporciona un formato común para los mensajes financieros, lo que facilita la comunicación entre los bancos y las plataformas de criptomonedas. Esto podría abrir nuevas oportunidades para las criptomonedas, quiere decir que tendrían que cumplir ciertos requisitos de seguridad. Por ejemplo, las criptomonedas podrían ser utilizadas para realizar pagos internacionales de forma más eficiente y segura, incluso entre instituciones financieras tradicionales. Esto gracias a que ambos sistemas usan un mismo lenguaje para comunicar sus operaciones. Por supuesto, esto no elimina la tecnología blockchain o de libro distribuido de la criptomoneda usada, solo sería un complemento a la misma. Cabe aclarar que algunas de las criptomonedas que están en el mercado ya cumplen con este estándar.
La evolución tecnológica continúa brindando nuevas oportunidades para mejorar el uso y la implementación de la norma ISO 20022. Avances como la inteligencia artificial, el blockchain y la digitalización están siendo aprovechados para ampliar las capacidades de esta norma y hacer frente a los desafíos del sector financiero.
Aunque la norma ISO 20022 ofrece numerosos beneficios, su implementación también presenta desafíos para el sector financiero. La transición a esta norma requiere una inversión significativa en tiempo, recursos y capacitación. Sin embargo, estos desafíos también presentan oportunidades para las instituciones financieras y las empresas. La adopción de la norma ISO 20022, cambiará, sin duda, el sector financiero y todo lo que esto implica.
La autora es Licenciada en Informática.
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