Parte II
Y para rematar la cereza sobre el pastel, Oruro se convertirá en la pieza clave para el MAS, como estrategia para ganar las elecciones generales de 2025. ¿Por qué Oruro?, no olvidemos que en este departamento, el contrabando y el narcotráfico son el motor del modelo socio comunitario productivo del MAS.
¿Por qué se dan estos resultados del censo 2024, perversos para el desarrollo y las condiciones de vida de la gente? Es muy sencillo, estos números son producto de la escasez de recursos económicos y financieros del gobierno, como no hay plata para mantener semejante aparato estatal, lo mejor fue hacer desaparecer gente, como por arte de magia. El Gobierno sabe también que la gente empezará a migrar del país a otras latitudes del mundo, por falta de oportunidades de empleo y por las malas condiciones de vida. Entonces las cifras del censo reciente se acomodan a sus expectativas y necesidades, menos dinero para municipios y gobernaciones, más dinero para mantener a su parasitocracia y de esta manera comprar conciencias y lealtades a favor y en defensa de su régimen de Poder. Es decir, los oficialistas quieren obligar e imponer a los bolivianos que voten por su régimen y su modelo económico basado en actividades ilícitas (corrupción, contrabando, narcotráfico y tráfico de tierras y personas). Y no cederán hasta lograr su objetivo.
Estos resultados solo generan incertidumbre y desazón entre los bolivianos. Los gobernantes tienen miedo a la gente joven, que quiere un cambio verdadero de todo el sistema fraudulento instaurado en Bolivia. Es que quieren seguir optando por el centralismo asfixiante, quieren seguir apostando por la intervención del Estado en todo aspecto de la vida nacional y quieren seguir controlándolo todo, hasta lo que comemos y respiramos. Para ellos Bolivia es un experimento, por órdenes de China y Rusia. Desapareció el dólar, quieren calcular nuestra reacción, para luego presentarnos la solución de la moneda digital. No se dan cuenta que es un plan muy bien calculado, somos el conejillo de indias de los poderosos, todo es geopolítica. Pero no olvidemos las palabras del Libertador: “Bolivia es un desenfrenado grito de libertad”. Somos hijos de la libertad, ese es nuestro destino.
El autor es Politólogo y Docente de Postgrado.