Puntualizando que el Movimiento al Socialismo (MAS) ha jugado un papel significativo en la promoción y facilitación de actividades que han contribuido a la deforestación y los incendios en el país, la diputada nacional María René Álvarez aseguró que Evo Morales carece de moral para apuntar a posibles a responsables por los incendios forestales, cuando fue su gobierno el que promovió la aprobación de dichas normativas.
Álvarez recordó que el gobierno del MAS fue el que fomentó los avasallamientos y la toma de tierras, permitiendo la ocupación ilegal de regiones críticas para la conservación ambiental, complicidad que no solo exacerbó los problemas de deforestación, sino puso en riesgo a las comunidades indígenas y sus territorios.
«El masismo promulgó la Ley 741, una legislación que autoriza el desmonte de hasta veinte hectáreas en pequeñas propiedades, comunitarias o colectivas, y asentamientos humanos establecidos. Esta ley ha tenido un impacto devastador en el medio ambiente, ya que ha incrementado significativamente los chaqueos y los focos de calor, la flexibilización de las restricciones para el desmonte y ha facilitado la creación de comunidades masistas fantasmas, cuya actividad principal es el tráfico de tierras», sostuvo la legisladora
Por lo expuesto, rechazó que ante el fracaso de políticas económicas para la seguridad alimentaria, ahora se quiera responsabilizar y pasar la culpa al empresariado y modelo productivo cruceño, como un supuesto sector depredador. «El modelo de desarrollo de nuestra tierra siempre va a pensar en la población y, por tanto, no va a atentar contra la vida y la salud», señaló.
El fin de semana, Evo Morales, en declaraciones a radio Kawsachun Coca, afirmó que las aprobación del paquete de leyes denominadas incendiarias, durante su gestión, fue una respuesta a las demandas del sector agrícola.
«No nos hemos inventado, hemos atendido esta demanda. Ha habido leyes, soy sincero, no tengo porque desconocer, lavarme las manos. Ha sido a pedido de ellos, para evitar conflictos», dijo Morales, ante todos los cuestionamientos que responsabilizan a su gobierno por la actual crisis ambiental en el país.